La ministra de Transportes y Movilidad, Raquel Sánchez, todavía ha cargado más contra la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, para plantear ir al Tribunal Constitucional si tiene que aplicar las nuevas medidas de ahorro energético: "Recordar que estamos en un estado de derecho y las normas se cumplen. La Comunidad de Madrid no se puede convertir en una especie de aldea gala aliada de Putin y eso es lo que pretende a la señora Ayuso. Reprobamos las actitudes insolidarias que no están a la altura. Los comentarios insolidarios no están a la altura. Recordaría al PP que estamos en una situación compleja y muy complicada donde la UE nos pide esfuerzos y pedimos a Feijóo que ponga orden a su partido. Él mismo veía bien hace unos días estas medidas y ahora Ayuso y otros miembros del Partido Popular no están de acuerdo. Por lo tanto, pido rigor y responsabilidad delante de lo que estamos viviendo", en declaraciones a RTVE.

Raquel Sánchez también se ha referido a Putin por toda la crisis que la guerra de Ucrania ha comportado: "La mayoría de sectores económicos aplauden las medidas de ahorro energético necesarias ante el chantaje de Putin. Son medidas justificadas, razonables y menos exigentes que en países de nuestro entorno porque hemos hecho los deberes". En paralelo ha sacado pecho de la propuesta de gratuidad de los trenes: "La gratuidad de los servicios de cercanías y media distancia tendrá un impacto positivo en los bolsillos de los ciudadanos y atraerá a más usuarios al transporte público".

El PP, confundido

Ayer, el mismo presidente español Pedro Sánchez ya tildó Ayuso "de egoïsta" y se reproduce, nuevamente, una disputa entre el gobierno de La Moncloa y el autonómico madrileño que recuerda las primeras épocas de la pandemia por la covid. En paralelo, Feijóo queda en medio del revuelo sin posicionarse. Con menos de un mes, ha cambiado dos veces de posición en relación con el ahorro energético para seguir oponiéndose a las propuestas de Sánchez. Primero para burlarse de las medidas de ahorro que el presidente propuso en el debate del estado de la nación, después para trasladarlas él mismo cuando interpretó que el Gobierno se oponía a las que estaba promoviendo Europa -por error-, y ahora para rechazar, por "frívolas" las que se aprobaron en el Consejo de Ministros.

Ha sido el coordinador general de los populares, Elías Bendodo, el encargado de defender a la madrileña, asegurando que la dirección del partido "entiende" la decisión de llevar el decreto de medidas energéticas al Tribunal Constitucional, pero no ha querido confirmar uno 'no' de los populares cuando la medida se tenga que convalidar en el Congreso. En una entrevista también en RTVE, Bendodo ha recordado que el PP "no es un partido monolítico" y los alcaldes y presidentes de comunidad autónoma pueden adoptar sus decisiones, ya que "no se puede imponer a las comunidades un decreto que no se ha hablado con nadie". En todo caso se ha mostrado dispuesto a sentarse y hablar con el Gobierno sobre las medidas, que hasta ahora se han aprobado "sin ningún tipo de consenso".