La ministra de Justicia, Dolores Delgado, ha insistido este miércoles en la Comisión de Justicia del Congreso de los Diputados que es una "víctima por partida doble" con la filtración de los audios que grabó el comisario jubilado José Manuel Villarejo para "desetabilizar el Gobierno" y lograr su impunidad en el caso 'Tándem', por el que se encuentra en prisión provisional desde noviembre del año pasado. Además, ha avisado que no se va a dejar "amedrentar" por el uso que la derecha está haciendo de dichas escuchas.

"Soy una víctima por partida doble", ha dicho la titular de Justicia durante su comparecencia para explicar su relación con el expolicía, ya que se está utilizando su cargo como ministra para que este "miembro de la cloaca del Estado" pueda "desesetabilizar el Gobierno para tener una ventaja procesal".

También, ha reiterado que "la derecha, extrema derecha y extrema extrema derecha" está haciendo uso de las informaciones que están saliendo a raíz de la filtración de estos audios para "paralizar que el gobierno avance en su agenda".

Delgado ha vuelto a señalar que la grabación se obtuvo "de manera ilegal" y que tiene el objetivo de "condicionar la acción del ejecutivo del que formo parte". "Es algo que los autores no han conseguido, ni van a conseguir", ha añadido.

Es más, ha recordado que el propio Villarejo avisó que si no le dejaban en libertad antes de Navidad haría uso de los "20 terabytes" de archivos que tiene para lanzar una "traca final". "Esto es un chantaje al Estado a través de mi persona, como ministra del gobierno de España. Es una extorsión al Gobierno. Me atacan a mí por ser ministra", ha afirmado Delgado al respecto.

"No soy amiga de Villarejo"

Durante su intervención a la comisión, también ha defendido que "no "ha mentido" y niega cualquier relación profesional con el excomisario encarcelado y también niega que sea su "amiga". Ha reconocido haber ido a una comida con la cúpula policial en materia antiterrorista con quien trabajaba "habitualmente" (invitada por una compañera de la Audiencia Nacional) pero ha evitado entrar en el contenido de las grabaciones.

Delgado defiende que son grabaciones conseguidas de manera "ilícita" y que suponen "la materia de la que se sirve el chantajista". Ha apuntado que tampoco valoraría ninguna otra grabación conseguida de manera ilícita que afectara a ninguna otra persona.

Según la ministra, la oposición se ha sumado al "chantaje" a su persona para acabar con el "gobierno decente de Pedro Sánchez, reformista y que quiere limpiar". "No aceptaremos amenazas de las cloacas ni de quien les hace el juego sucio", ha sentenciado. Por lo tanto, ha dejado bien claro que no tiene ninguna intención de dar ningún paso al lado.