La proclamación de la República ha vuelto a aterrizar este mediodía sobre la Mesa del Parlament. El órgano de gobierno de la Cámara ha aceptado a trámite las enmiendas de la CUP que proponen reiterar la declaración de independencia del 27 de octubre y que se tendrán que debatir en el pleno de este jueves. JxCat y ERC han votado a favor de la aceptación a trámite de las enmiendas, a pesar de la advertencia de los letrados que pueden entrar en contradicción con las sentencias y interlocutorias que el TC dictó la legislatura pasada en relación a este tema. En cualquier caso, a pesar de la admisión a trámite, es JxCat quien tendrá que decidir que enmiendas sobre su propuesta aceptan y cuales, por tanto, se acabaran votando en el pleno. El grup de Puigdemont ha negociado durante toda la tarde del miércoles un texto transaccional.

Los cupaires registraron ayer, martes, estas enmiendas a la propuesta de resolución de JxCat de restitución del president, Carles Puigdemont. Esta resolución tiene que ser el primer paso para la convocatoria del pleno de investidura y la constitución del nuevo Govern.

La primera enmienda de la CUP propone añadir al texto de la propuesta que el Parlament "se reafirma y reitera en la declaración de independencia y en la proclamación de Catalunya como un Estado independiente en forma de República que fueron votadas y aprobadas el 27 de Octubre del 2017". La segunda de las enmiendas reivindica el Parlament como expresión del "referéndum democrático de autodeterminación del 1 de octubre del 2017". En total, son quince enmiendas.

Después de una tarde de reuniones, los cupaires y JxCat habrían conseguido pactar, según algunas fuentes, incorporar en la resolución, a través de un texto transaccionado, una declaración reafimando la voluntat que Catalunya se convierta en un Estado en forma de República. A partir de este acuerdo, según miembros de los dos grupos, JxCat tiene previsto rechazar, entre otras la enmienda primera y tercera donde se reafirma la proclamació del 27 de octubre. 

A pesar de todo, Ciutadans y el PSC han pedido la reconsideración de la decisión de admitir a trámite las enmiendas y han advertido que exigirá también que la Mesa estudie la admisión a trámite de cualquier texto consensuado a partir de estas propuestas.

Durante la reunión de la Mesa, tanto el secretario general del Parlament, Xavier Muro, como el letrado mayor, Antoni Bayona, han querido hacer constar que las enmiendas cupaires pueden entrar en contradicción con las sentencias y los autos del TC.

También, el vicepresidente segundo, José María Espejo Saavedra de C's, ha hecho constar que, a pesar de que parte de los miembros actuales de la Mesa no han sido expresamente advertidos ya que no formaban parte de la misma en la legislatura pasada, las sentencias del TC son de obligado cumplimiento. Tanto Cs como el PSC prevén presentar petición de reconsideración de la decisión, lo cual obligará a convocar antes del pleno, previsto para las diez de la mañana, una nueva reunión de Mesa, de la Junta de Portavoces y, de nuevo, de la Mesa. Espejo ha recordado además que la Mesa se tendrá que volver a reunir si hay alguna transacción de las enmiendas que incluye los aspectos señalados por el TC. El PP no ha asistido a la reunión, donde puede estar presente a pesar de no tener voto.

Por su parte, el vicepresidente primero, Josep Costa, de JxCat, ha rechazado que la función de los miembros de la Mesa sea censurar la actividad parlamentaria y que los actuales miembros no se tienen que sentir concernidos por resoluciones de la legislatura pasada. Este ha sido también el argumento esgrimido por la republicana Alba Vergés que ha subrayado que como miembros de la Mesa tienen que defender el derecho de los diputados y no se puede coartar el debate político.

A lo largo de la mañana, las negociaciones entre JxCat, ERC y la CUP se han concentrado en pactar las enmiendas cupaires y las posibles transaccionales en que se acuerde un texto de consenso. Todo ello, sabiendo que Cs ya ha advertido que, en caso de que haya un nuevo texto a partir de una transacción, será necesaria una nueva reunión de la Mesa.