Los plazos son ajustados para salir de la gobernabilidad española y la mesa del Congreso ya estudia una propuesta de sesión de investidura que pueda celebrarse antes de la disolución de las Cortes el 31 de octubre. Según ha informado el órgano soberano, se buscaría que el pleno en que se debata sea "más comprimido", para que la segunda votación, que se tiene que celebrar 48 horas después de la primera, tenga lugar antes del mismo 31. Eso en caso de que haya finalmente candidato.

Así lo ha avanzado la secretaria primera de la Mesa, Alícia Sánchez-Camacho, que ha apuntado también que el proceso de consultas de los líderes políticos con el Rey sea "más rápido, más reducido", con lo que se podría hacer todo el proceso la última semana de octubre. La Constitución establece que el Rey deberá disolver las Cortes dos meses tras la primera votación de investidura de un candidato, esta vez fue Mariano Rajoy, después de las elecciones del 26 de junio.

La también presidenta del PP catalán ha recordado que el PSOE tomará su decisión en un comité federal que previsiblemente estará después de las primarias del PSC, previstas para el 15 de octubre. "La última semana habría tiempo", ha dicho Sánchez-Camacho en una entrevista televisiva. La Mesa del Congreso, ha explicado, no entra en cuestiones internas del PSOE, pero sí que tiene estudiado que "habría tiempo formal" si el proceso ocurre de este modo.