Meritxell Borràs, condenada por desobediencia a una multa, ha calificado de "muy injusta" la sentencia del juicio al procés que ha hecho pública el Tribunal Supremo esta mañana y que impone penas de hasta 13 años a los presos políticos por los delitos de sedición y malversación.

Borràs, en declaraciones en Catalunya Radio y RAC1, ha insistido en que las condenas tendrían que ser como la suya, de desobediencia.

Visiblemente emocionada, la exconsellera de Gobernación, para quien la fiscalía pedía 7 años de prisión y 16 de inhabilitación, ha explicado como Joaquim Forn, condenado a 10 años de prisión, ha llamado esta mañana en el grupo municipal de JxCat a l'Ajuntament de Barcelona para que le hicieran llegar a ella su felicitación. "les ha dicho que estaba muy contento por mí".