Andreu Viloca, tesorero de CDC, conducido en los juzgados de Tarragona / EFE

El juez ha decretado el ingreso en prisión preventiva incomunicada y sin fianza del tesorero de CDC, Andreu Viloca, acusado de seis delitos de corrupción. A la mismo hora que trascendía la noticia, el president Artur Mas explicaba a los diputados de Junts pel Sí por qué ha pedido comparecer ante la Diputació Permanent para informar sobre las adjudicaciones de obras de la Generalitat, lo que ha hecho de manera directa a la presidenta de la Cámara sin consultarlo a los diputados. El tesorero de CDC, detenido el miércoles en la operación Petrum III sobre presumpta corrupción de CDC, habrá pasado la segunda noche en la prisión acusado de soborno, blanqueo de capitales, prevaricación, financiación ilegal, alteración de precios en concursos y subastas publicas y falsedad en documento mercantil, cuando a las 10'30 de la mañana Mas se presente en la sala de grupos delante del órgano que gobierna la Cámara catalana de manera interina entre legislaturas.

No esconderse de nada

El president de la Generalitat ha insistido esta mañana ante los diputados que ha pedido comparecer porque, al igual que hizo a principios de septiembre, quiere dar explicaciones y dejar claro en sede parlamentaria que no se esconde de nada, a pesar de la presión que comportan las actuaciones de la Fiscalía sobre el presunto pago de comisiones del 3% en CDC a cambio de adjudicaciones de obras, en plenas negociaciones abiertas entre JxSí y la CUP sobre la investidura del nuevo presidente. En los pasillos, los ujieres han retirado los muebles para ubicar los platós de televisión desde donde el lunes se retransmitirá la constitución del nuevo Parlament que nace con el objetivo de poner en marcha un proceso constituyente hacia la independencia, pero en la Diputació Permanent aún se sentarán algunos diputados que ya han retirado sus pertenencias de los despachos porque a partir del lunes ya no formarán parte de la Cámara.

Copa de De Gispert

Ni los funcionarios más experimentados del Parlament recuerdan una situación semejante. Una reunión de la Diputació Permanent para que comparezca el presidente el último día de funcionamiento de la Cámara en pleno traspaso de legislaturas. Incluso la presidenta saliente del Parlament, Núria de Gispert, ha celebrado ya su copa de despido con los funcionarios. El presidente tendrá tiempo ilimitado para presentar sus argumentos. Acto seguido los grupos, 10 minutos cada uno, y de nuevo intervendrá Mas para responder uno a uno, o todos juntos en los grupos, que acto seguido tendrán un nuevo turno de intervenciones.