El final de la comparecencia en el Parlament de Artur Mas ha sido una traca. Un choque directo entre la CUP y el expresident.

Benet Salellas ha desafiado a Mas: "Estaría bien que encontrara su momento y que dejase de defender este proceso, que de lo que va es de derrocar el régimen que dirigía".

Mas, sin turno ya de réplica, con micrófono ya cerrado y los brazos completamente cruzados sobre su pecho, ha lanzado a los cuatro diputados de la CUP, Benet Salellas, Eulàlia Reguant, Julià de Jodar y Mireia Vehí: "Cuánto os estorbo. Pensaba que quien molestaba era el Estado español".

Y el encontronazo ha vuelto a evidenciar las malas relaciones de Mas con la CUP, quienes pidieron que se apartara del procés y lo obligaron a dar el paso al lado, renunciar a la presidencia y nombrar candidato a encabezar el Govern a Carles Puigdemont.

El final de traca ha venido precedido de una escalada en el tono de las intervenciones entre Mas y Salellas. Mas ha asegurado que la CUP, y en concreto Benet Salellas, le pidió que difundiera el procés a nivel internacional pero que, por otra parte, "tiene el encargo del Govern, del cual ustedes no forman parte", ha dicho.

Salellas ha respondido que, desde que se dio "la no investidura" ha pasado mucho tiempo en el cual la corrupción "ha salpicado mucho" a CDC.