Sin descartar en ningún momento que el president en funciones, Carles Puigdemont, venga a Catalunya e incluso aparezca en el Parlament para su investidura, el exministro de Asuntos Exteriores José Manuel García Margallo ha dicho bien claro en Espejo Público de Antena 3 que el único candidato a la presidencia de la Generalitat "está completamente fuera de control y marca el juego" y también los tiempos.

Margallo da por seguro que "ni ERC ni ningún otro partido pisarán la raya de la legalidad porque las consecuencias son políticas y son penales", pero ha alertado al mismo tiempo de que la fractura social en Catalunya aumenta y ha lamentado que "nos estamos perdiendo en los detalles".

El exministro lo ha justificado bajo el argumento que "Mas pasó y Puigdemont pasará", pero ha advertido que "el problema catalán continuará". Ha sido justamente en este punto que ha recordado que cuando Francesc Macià murió, el 25 de diciembre de 1933, "todo el mundo salió a la calle"; de hecho, se celebró una multitudinaria manifestación de duelo durante su entierro.

Y no solo eso. Todavía en el terreno de las advertencias, Margallo también ha recordado que "a Macià por poco le matan cuando llegó después del Estatut de Núria", un Estatut en que participaron el 87,8% de los catalanes y en que ganó el por un 99,6% de los votos. Cuando llegó al Congreso de los Diputados, Madrid acabó recortándolo.

Después de la entrevista ha respondido a un tuit de la cuenta oficial de Tabarnia en que le recordaban que "no es que queramos seguir siendo catalanes, es que nos están amenazando con obligarnos a dejar de ser lo que siempre hemos sido".

Margallo les ha hecho saber de que es "perfectamente consciente de que lo que se persigue es seguir siendo al mismo tiempo catalán, español y europeo, que es razonable en una sociedad plural y moderna".