El sindicato ultra Manos Limpias ha reconocido en un comunicado que su denuncia contra Begoña Gómez, esposa de Pedro Sánchez, puede estar basada en denuncias falsas. Lejos de cualquier rectificación, la entidad se ha lavado las manos y ha apuntado: "Será ahora el juez quien tendrá que comprobar si estas informaciones periodísticas son ciertas o no". En el texto se recoge que después de ver las noticias que algunos medios publicaban sobre Gómez y delante de lo que consideraban la inacción de la Fiscalía, Manos Limpias decidieron interponer ellos la demanda contra la esposa del presidente español.

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La organización ha expuesto que después de conocer informaciones sobre las supuestas actividades de Gómez "a través de varios periódicos digitales" y viendo que "la Fiscalía no actuaba de oficio, aunque las noticias mencionadas hacía semanas que se publicaban, procedí a poner en conocimiento del Juzgado competente estas informaciones". El comunicado, aunque viene de la entidad, está escrito en primera persona. Quien lo escribe es su secretario general, Miguel Bernad, y así lo firma. Bernad sentencia al texto sacudiéndose cualquier culpa: "Si estas no son ciertas, serán los que las publicaron, los que tendrán que asumir la falsedad, pero si no son inciertas, entendemos que la causa judicial tendrá que proseguir".

Manos Limpias ha aprovechado para cargar contra Pedro Sánchez por su respuesta a la denuncia a su mujer. Bernad califica de "inaceptable" la reacción del presidente socialista. Además, sostiene que Sánchez "ha procedido como respuesta a insultar" a Manos Limpias por haber ejercido un derecho constitucional, diciendo que son una organización ultraderechista. "O dando a entender que formamos parte de una campaña derechista contra él, cosa que es falsa," ha sentenciado en el comunicado.

La larga lista de denuncias del sindicato

El nombre de Manos Limpias es un viejo conocido entre el movimiento independentista, ya que a menudo la entidad ha denunciado a dirigentes y ha participado en causas contra el Procés. Recientemente, llevó ante el Supremo los acuerdos entre el PSOE, Junts per Catalunya y ERC y por la tramitación de la ley de amnistía, pero el tribunal no admitió la denuncia. En la espalda cargan otras denuncias como, por ejemplo, contra el 9-N, para tratar de ilegalizar el Assemblea Nacional Catalana (ANC) o contra Esther Capella, exconsellera de Justicia y actual consellera de Territori, por los permisos de los presos políticos.

No solo el independentismo ha estado en el punto de mira de esta organización. Manos Limpias ha participado en procesos judiciales contra el expresidente José Luis Rodríguez Zapatero, Unidas Podemos o el juez Juan del Olmo por el 11-M, entre otros. También han formado parte de la acusación en el caso Nóos, solicitando la imputación de la infanta Cristina de Borbón.