El presidente de Aigües de Catalunya y exdirigente de CDC, David Madí, ha declarado este martes ante el juez que investiga el caso Volhov que no dio credibilidad al supuesto apoyo de Rusia al proceso independentista. Fuentes presentes en la sala han explicado que Madí lo ha tachado de fantasías y que ha asegurado que en la misma conversación telefónica que consta en la causa ya no le dio credibilidad.

Se trata de una conversación con el presidente de la fundación CATmón, Víctor Terradellas, intervenida por la Guardia Civil, que el juez mencionó junto con otras escuchas en el auto en que afirmaba que Rusia supuestamente ofreció al expresident Carles Puigdemont 10.000 soldados y pagar toda la deuda catalana si declaraba la independencia.

Madí, investigado en esta causa de presunto desvío de fondos al independentismo, también ha negado haber participado en impulsar una plataforma de criptomonedas con la que la Generalitat supuestamente pretendía garantizar estabilidad financiera y evitar el control del Estado en los movimientos de capital, según el juez.

El juez también señaló en su auto que Madí podía saber quién lideraba Tsunami Democràtic, lo que él ha negado, y ha afirmado que esta sospecha se basa en conversaciones informales en un momento en el que el asunto estaba de actualidad.

Declaración voluntaria

Madí fue uno de los 21 detenidos por esta causa en octubre de 2020 y quedó en libertad tras pasar a disposición judicial, cuando se acogió a su derecho a no declarar, pero después pidió declarar voluntariamente ante el juez.

Así, este martes ha contestado a las preguntas de todas las partes a excepción del fiscal, que no se ha presentado a la declaración. Ha contestado sobre todos los temas de la causa que le afectan, entre ellos el presunto intento de tráfico de influencias cuando participó en la interlocución por la negociación de las licencias VTC y se reunió, entre otros, con el exconseller Damià Calvet.

También se le atribuye presunto tráfico de influencias, que ha negado, en contratos con las prisiones catalanas al ofrecer una tecnología de detección de coronavirus en aguas residuales: Madí ha explicado que Presons pidió a Aigües de Catalunya conocer la tecnología, pero que finalmente no hicieron ninguna prueba piloto.