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Los próximos días se celebrará una reunión a cal y canto, solicitada por Junts pel Sí (JxSí) en los otros grupos parlamentarios, para desencallar una de las decisiones más importantes de la presente legislatura: la composición de la Mesa del Parlamento. Una batalla por la cual todos muestran un interés casi vital. Ya empiezan a aparecer los primeros nombres.

La mayoría independentista

Tanto JxSí como la CUP negocian a fin de que la Mesa, primer cedazo de la práctica parlamentaria, tenga una mayoría independentista y evitar que las iniciativas mueran antes de empezar o queden durmiendo en un cajón.

El grupo mayoritario ha puesto toda su fuerza de choque parlamentaria, dirigida por Jordi Turull y Lluís Corominas, al alcanzar los cuatro sitios de la Mesa que permitirían esta mayoría "indispensable" para los intereses del proceso. Una mayoría que pasaría o bien para que JxSí pusiera los cuatro nombres o bien pusiera tres y cediera uno a la CUP. La meta es consolidar esta mayoría "sin fisuras", aunque la CUP se hace la desganada en esta decisión y dicen que "pasan".

Si los cuatro nombres fueran de JxSí, CDC propondría un diputado bregado en el arte parlamentario como es Lluís Corominas y dejaría el segundo nombre a uno independiente de la órbita convergente que, en principio, sería una mujer. Una decisión que puede variar si ERC propone a Marta Rovira como presidenta (ella ya se descartó) o Anna Simó, que todo el mundo da por descontado que continuaría en la Mesa como vicepresidenta.

Sea como sea, JxSí está con un ojo abierto y un demonio en cada oreja para evitar "sorpresas de última hora" que pongan en peligro una mayoría independentista de la dirección de la cámara.

Los dos de Ciudadanos

Ciudadanos, como segunda fuerza de la cámara y dada la fórmula parlamentaria de "mayores restos", puede aspirar a una vicepresidencia, por la que piensa plantar batalla. Las negociaciones internas del grupo han dejado dos nombres para esta plaza: el veterano diputado Matías Alonso y José Maria Espejo Saavedra. Este último tiene más números para alcanzarla. Ha quedado fuera de la carrera Carmen de Rivera, abogada, portavoz de Justicia y cinco años de experiencia en el Parlamento.

El PSC reclama un sitio

La portavoz del PSC en el Parlament, Eva Granados, se ha puesto en guardia para evitar esta mayoría absoluta independentista de la Mesa. "La pluralidad y la proporcionalidad son dos principios que consideramos esenciales tanto a la Mesa como a las comisiones y ésta no se da con cuatro miembros de JxSí", apunta.

El PSC confía al mantener un sitio, que ocuparía David Pérez, diputado con experiencia que se ganó fama defendiendo la posición de los socialistas contra la prohibición de los toros.

Sí que es Pot, al acecho

En CSQP no están muy preocupados. Fuentes de la dirección del grupo parlamentario admiten a El Nacional que creen tener asegurada una plaza, como la última legislatura.

De hecho, proponen Joan Josep Nuet, coordinador de EUiA, es decir, un miembro de la misma coalición que David Companyon, hasta ahora secretario cuarto de la Mesa por el grupo de ICV-EUiA.

El PP queda fuera

En esta legislatura, el Partit Popular podría quedar sin representación en la Mesa. Sus once diputados no le garantizan este escaño.

Se encontraría en la misma posición que ICV-EUiA en la novena legislatura, surgida de las elecciones del 2010: se quedaron sin representación.

"Importancia estratégica"

La dirección parlamentaria de JxSí insiste a El Nacional de la importancia estratégica de la Mesa en la legislatura que se abre. "Es el primer trámite de cualquier iniciativa parlamentaria", recuerdan. Además, esta legislatura muchas de las decisiones de la Mesa pueden comportar consecuencias personales si el Estado sigue presionando jurídicamente las decisiones del Parlament. "Tenemos que garantizar una Mesa con solvencia y que permita fluidez en los trámites parlamentarios claves del proceso", aseguran.