Toda la tesis sobre la manipulación de las actas del 1-O por parte de los Mossos d'Esquadra ha caído hoy durante el testimonio del sargento de la policía catalana con TIP 11594. Entre las acusaciones de la Fiscalía en el caso contra el major Josep Lluís Trapero, la intendente Teresa Laplana, el ex-director general de la policía Pere Soler y el ex-secretario general de Interior César Puig, hay la que afirma que los Mossos manipularon actas del cierre de los colegios del referéndum del 1 de octubre.

Uno de los mossos encargados de la supervisión de las actas ha explicado con pelos y señales que lo que se hizo fue transcribir las actas que se habían hecho a mano y revisarlas hasta dos veces. Un equipo de 50 agentes se encargó de este trabajo. Los últimos datos que se extraen sobre cierres de puntos de votación y material requisado es a la baja con respecto a los primeros balances. Un hecho que, a priori, iría en detrimento de los Mossos y sus mandos. Nunca se engrosaron las cifras, al contrario. Y hoy ha quedado claro que la orden de revisar todas las actas para que fueran lo más rigurosas posible vino del propio major del cuerpo, Josep Lluís Trapero.

El sargento de los Mossos, el primero del cuerpo que hoy ha declarado en el juicio, no ha tenido ningún problema en dar detalles ante las preguntas de Olga Tubau, que ha ido trazando el camino hasta llegar a la declaración que desmonta una de las tesis de las acusaciones.

 

 

A primera hora ha acabado de declarar el guardia civil con TIP C17150G que hoy ha enfocado su testimonio en dejar claro que uno de los mandos de Lleida dijo explícitamente en un chat de Whatsapp que "el major ha dado órdenes de no intervenir sin su orden". Ha insistido en que "no se actuaba sin orden expresa del major Trapero en ningún caso". Pero Olga Tubau le ha preguntado si consta esta orden del major por escrito. Si queda reflejada en algún correo o alguna comunicación. Y el testigo ha dicho que no, que sólo lo saben por boca del mando, lo cual pone en duda, por lo tanto, que Trapero realmente diera este tipo de órdenes.

 

 

El testigo ha relatado el caso de Lleida que la Audiencia Provincial archivó porque no encontró ninguna prueba concluyente. Y es que justamente el juez exculpa a los Mossos d'Esquadra de esta causa precisamente porque no los relacionan con el diseño del dispositivo del 1-O y porque el día del referéndum tampoco actúan al margen de CECOR central.

El juicio continuará el lunes por la mañana. Se mantiene el guion aunque hay seis testigos que tenían que declarar esta semana y que han quedado pendientes. El lunes, por lo tanto, declarará la secretaria judicial del juzgado de instrucción 13 de Barcelona que dirigió el registro en el Departament d'Economia el 20-S y que tuvo que salir por una puerta del terrado hasta poder llegar al teatro Coliseum. No vendrá a Madrid, declarará por videoconferencia e, igual que pasó en el juicio en el Tribunal Supremo, no le veremos la cara.