Segunda parte, corta y concreta, de la declaración del que fue mano derecha del mayor Josep Lluís Trapero, que ha servido para dejar claro que los Mossos no tenían ningún interés en el procés y que "fueron leales hasta el final". Ferran López ha querido desvincular claramente de las intenciones políticas al cuerpo de los Mossos d'Esquadra y los ha situado en el terreno del cuerpo policial que actuaba a las órdenes de la justicia.

A preguntes de Tubau, López ha desvinculado a Trapero del procés independentista. A él y a todos los comisarios.

 

 

La declaración del comisario, tanto hoy a preguntas de la abogada de Trapero, Olga Tubau, como del de la defensa de Soler, Cristóbal Martell, y ayer delante de la fiscalía, ha estado más encaminada a demostrar que los Mossos cumplían órdenes del fiscal y el TSJC, que no estaban alineados con el Govern, y que el debate independentista les generava incomodidad y desamparo, que a entrar en contradicción con Diego Pérez de los Cobos. De hecho la fiscalía ha evitado en las dos declaraciones contraponer las versiones, como sí que pasó en el Tribunal Supremo, lo que derivó en una petición de un cara a cara. En este juicio no ha sido así.

Entre los puntos destacados del interrogatorio de este martes está cómo se coordinó el dispositivo del 1-O y el papel de Trapero en las reuniones previas. Un punto débil de todo el procés que acabó derivando en la sustitución del mayor en las negociaciones.

Ferran López ha admitido que la relación entre Diego Pérez de los Cobos y el mayor Josep Lluís Trapero no era buena y que "iba a peor a cada reunión y se tenía que cambiar la interlocución. Restaba más que sumaba".

 

Los binomios

Ferran López ha explicado cómo se hizo la previsión para controlar 2.300 puntos de votación y ha asegurado que las pautas de los Mossos acordadas en las reuniones se siguieron "desde la primera palabra hasta la última".

El comisario ha explicado que nunca se le dijo que modificara el plan, pero que se intentó reforzar los binomios que garantizaban la presencia policial en los puntos de votación. Ferran López quería el apoyo de los 11.000 policías locales de toda Catalunya. Pero sólo consiguieron 479. "Tuvo un resultado pobre", ha lamentado.

Ferran López también ha defendido que fueran los Mossos los designados para acudir en un primer momento a los centros de votación, por su conocimiento del territorio, del entorno y de las personas, de manera que en este sentido "tenían ventaja sobre agentes de Policía y Guardia Civil", que quedarían a requerimiento de la policía catalana" en zonas no visibles en estos centros de votación".

20-S

De todo lo que pasó el 20-S ante el departamento de Economía durante el registro de la comisión judicial, lo que más puede ayudar a Trapero es que Ferran López haya ratificado la no connivencia del mayor con Jordi Sànchez.

El comisario ha ratificado lo que ya dijo el mayor Josep Lluís Trapero sobre la llamada que tuvo con Jordi Sànchez el 20-S. López confirma que la llamada ha relatado una conversación entre Jordi Sànchez y el mayor.

 

Ferran López ha desvinculado de todas las reuniones y dispositivos a Pere Soler, que era el director general de la Policia en aquel momento. También ha ratificado que ningún cargo político se personó en el CECOR, desde donde se dirigía todo el dispositivo "de amparo judicial".