El cantautor Lluís Llach ha salido en defensa de la presidenta del Parlament, Laura Borràs, después de las presiones que hace ERC para que abandone el cargo a raíz de su proceso judicial por una supuesta fragmentación de contratos. Llach ve una operación política. "Ya digo desde ahora que estoy al lado de la muy honorable presidenta Laura Borràs, la acusen de lo que la acusen y lo prueben con los trapicheos que lo prueben. Si actualmente las cloacas tienen algún objetivo, es ella, y con eso tengo bastante, además de creerme su inocencia. Abro paraguas", ha indicado Llach.

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En términos similares al cantautor se ha expresado la abogada, dirigente de Òmnium y miembro del Consell per la República, Neus Torbisco, que ha criticado la petición que ha hecho la expresidenta del Parlament Carme Forcadell para que Borràs abandone el cargo. "Lamentablemente, este argumento de Carme Forcadell es nefasto. Implica subvertir la presunción de inocencia imponiendo la carga de la prueba a los acusados y perseguidos de manera especialmente arbitraria a causa de su ideología política independentista. Es el mismo patrón que ha afectado a la expresidenta del Parlament. Todos los juristas sabemos que el derecho es interpretable y manipulable; pero las intenciones de los que lo aplican no son neutrales. Triste que las propias víctimas no entiendan el significado de no estar en situación de normalidad institucional", ha añadido.

Desde Junts per Catalunya han cerrado también filas con su presidenta: "Quiero empezar esta intervención dando todo el apoyo a la presidenta Borràs", ha proclamado desde el hemiciclo del Parlament el portavoz de Junts Josep Rius, antes de empezar una interpelación.

"Una vez más se encuentra bajo la espada represiva del estado. Es el enésimo ejemplo de una situación de persecución que ya no sólo denunciamos nosotros" ha dicho Rius antes de preguntar a la consellera Victòria Alsina sobre el informe del Consejo de Europa que certifica que el estado español persigue el independentismo. "Es un hecho, la calidad democrática del estado español vuelve a estar cuestionada y su reputación internacional todavía más dañada", ha añadido el diputado de Junts.

Borràs no ha hecho ninguna intervención sobre su caso. Ha iniciado el pleno dando paso a la lectura de una declaración de la Junta de Portavoces sobre Melilla, que ha acabado leyendo el tercer secretario de la Mesa, Carles Riera, ya que Borràs está visiblemente afónica. No ha dicho nada en el Parlament pero sí en las redes sociales. Fue el miércoles por la noche cuando explicó que se había enterado de las novedades judiciales a través de la prensa: "Todo muy de democracia perfecta, ir cargándose derechos uno tras el otro. A punto para un juicio justo", ironizó la presidenta.