El rompecabezas judicial del proceso lo es también para|por Pablo Llarena que busca la manera de poder hacer un juicio por rebelión el más rápido posible. Pero la justicia internacional que tiene que resolver las extradiciones de Carles Puigdemont, Clara Ponsatí, Meritxell Serret, Toni Comín y Lluís Puig no está respondiendo como Llarena esperaba y el magistrado ha hecho un desnudo cambio de timón.

Ahora ha abierto una pieza separada, según han confirmado a El Nacional fuentes judiciales, donde hay todos los investigados que están en el exilio y que incluye, también, Marta Rovira y Anna Gabriel. De hecho, es habitual en procesos donde parte de los acusados están huidos que se abra la pieza separada.

El giro judicial no tendría relevancia si no fuera porque el mismo magistrado dijo en un auto del mes de diciembre que todos los acusados irían al mismo juicio y que haría un mismo procesamiento para todos para juzgarlos por los mismos delitos.

 

Llarena obvia esta intencionalidad y para acelerar el proceso contra el proceso separa la causa de los que están en territorio español y los que no, sin confiar mucho con las extradiciones. Como en todos los casos, si finalmente las euroórdenes fueran efectivas y cada uno de los países donde hay los exiliados entregara a los acusados en España, entonces el magistrado volvería a unificar las causas.

La intención de Pablo Llarena, sin embargo, es acelerar tanto como pueda. Por eso se quiere habilitar el mes de agosto y llegar a juicio este otoño.

No será, tampoco, un caso excepcional. El verano pasado ya se habilitó el mes de agosto en el TSJC ante la inminencia del referéndum del 1 de octubre y todas las instancias judiciales que ya estaban llegando.

El miércoles Llarena firmó la providencia donde abría la pieza separada aunque todavía no lo ha hecho llegar a las partes, según explican fuentes judiciales. Hoy tampoco lo hará todavía. No se lo espera para|por el Tribunal Supremo. Llarena no tiene prisa para comunicarlo. De hecho, hace 15 días que tiene el informe de Hacienda de Cristobal Montora sobre el delito de malversación y todavía tampoco lo ha hecho llegar a los abogados de las defensas.