Crida de los CDR para llevar esteladas a las etapas de Catalunya y el País Valencià de la Vuelta 2023, con el fin de pedir que la competición ciclista abandone el territorio. "Dejemos claro con esteladas, banderas, carteles y pintadas que la Vuelta invade los Països Catalans y no es bienvenida", han pedido los Comitès de Defensa de la República en un tuit de este jueves. Si la gente responde, es posible que veamos imágenes como las que se vieron en Lleida en 2018 —cuando los ciclistas llegaron a la ciudad entre esteladas y gritos de "libertad presos políticos".

Faltan dos semanas para que la Vuelta 2023 pase por los Països Catalans. Será del 26 al 29 de agosto en Catalunya, para después estar del 30 de agosto al 2 de septiembre en el País Valencià. Durante estos días, los CDR han hecho un llamamiento para qué "no les dejemos ni un palmo de carrera limpio" de esteladas, banderas, carteles y pintadas a los ciclistas. Así pues, el 26 de agosto será en Barcelona; el 27, de Mataró a Barcelona; el 28, de Súria a Andorra; el 29, de Andorra a Tarragona; el 30, de Morella a Borriana; el 31, de Vall d'Uixó a Javalambre; el 1 de septiembre, de Utiel a Oliva; y el 2, de Dènia a Xorret de Catí.

Recorrido Vuelta 2023
El recorrido de la Vuelta 2023

En las competiciones ciclistas es habitual ver esteladas. Más allá del caso arriba mencionado de Lleida, a menudo se ven banderas en la televisión —así como mensajes en el suelo. Pero no solo hablamos del independentismo catalán, sino que también es común ver símbolos del independentismo gallegos o vascos. Sin embargo, es verdad que a veces estos símbolos cuestan de ver: no porque no estén, sino porque la televisión los esconde. Es lo que pasó en 2021 con el Tour de Francia a su paso por la Catalunya Nord, que la ANC llenó la etapa de esteladas y RTVE lo ignoró.

La protesta de los CDR en la Vuelta 2023 tendrá lugar en un momento que la prensa internacional está pendiente de la formación del nuevo Gobierno, que dependerá de Junts. Justo este jueves es cuando el PSOE ha enfilado la negociación de la Mesa del Congreso, la primera prueba de fuego para Pedro Sánchez. El ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, se ha puesto manos a la obra a reuniones para asegurarse que el renombre "mayoría plurinacional" se imponga dentro de una semana a la primera votación decisiva. Por otra parte, el PP también se ha abierto a pactar con el partido de Carles Puigdemont: "Tenemos que hablar con todos, sin tragárnoslo todo".