Los partidos de la oposición han coincidido a cuestionar que el Govern pueda revertir los recortes sociales sin presupuestos. Este es uno de los retos que se ha marcado el president Puigdemont este martes, cuando ha hecho balance de los 100 días de gobierno. Según la oposición, sin presupuesto "todo es papel mojado".

Desde CSQP, Lluís Rabell ha valorado en positivo que Puigdemont apueste por un plan para revertir los recortes pero ha señalado que “llega tarde y que todo lo que ha anunciado el presidente recae en la adopción de los próximos presupuestos y que no hay garantía de qué prosperen”.  

La división, lastre de la acción del Govern

Eva Granados (PSC) ha insistido que “el excel, al contrario que el power point, no lo aguanta todo” y ha preguntado a Junts pel Sí si se alineará con la CUP y apostará por “unos presupuestos desobedientes”, tal como han pedido los cupaires. Una opción que pasaría, entre otras cosas, por superar el techo de déficit que el Gobierno español imponga a las comunidades autónomas.

La socialista ha insistido en que el plan de Govern que ha presentado Carles Puigdemont “no es creíble porque no tiene una mayoría parlamentaria estable y tiene que luchar contra las discrepancias internas de Junts pel Sí y las diferencias entre la coalición y la CUP”. Por todo eso, Granados ha definido la legislatura como “excepcional pero porque tiene una hoja de ruta que hace aguas” y ha asegurado que el diálogo del ejecutivo catalán con las entidades sociales es inexistente.

Rajoy-Puigdemont y el victimismo

Cuando quedan menos de 24 horas para el encuentro entre Puigdemont y el presidente del Gobierno español en funciones, Mariano Rajoy, el PP ha criticado con dureza el relato del Govern. “Hemos observado un cambio de estilo en el president que es una interpretación chapucera del sufrimiento de las personas. Utilizar el padecimiento de la gente para alimentar el discurso independentista es despreciable”, ha dicho el portavoz parlamentario del PP, Enric Millo.

Millo se ha referido a la ley de pobreza energética y ha afirmado que el ejecutivo español no tiene ningún interés en recurrir esta ley y que alimentar el victimismo con mentiras y manipulaciones “no es la mejor manera de preparar una reunión importante como la de mañana”.

Inacción y corrupción

Ciutadans ha lamentado que estos primeros cien días de Govern de Puigdemont se caracterizan por la “inacción” y ha reprochado que el president lidere un gobierno que “haya priorizado saltarse el Estatut y el reglamento del Parlament”.

Precisamente, el portavoz, Fernando de Páramo, ha cargado contra la presidenta de la cámara, Carme Forcadell, de quien ha dicho que “parece la presidenta de l'ANC”, y también contra el mismo Puigdemont, a quien ha reprochado que “deje en manos de la CUP el pasado y presente” del país. En este punto, Ciutadans ha vuelto a poner en valor los 40 diputados que tienen en el Congreso y ha reiterado que no renunciarán a defender su proyecto por Catalunya.     

Aparte, De Páramo también ha criticado que Puigdemont no haya previsto un plan de choque contra la corrupción: “De las 51 medidas que aprobó el gobierno de Mas, sólo se han aplicado un 10%”, ha recordado.