La diputada de la CUP Eulàlia Reguant ha manifestado a la ACN que si el president de la Generalitat, Pere Aragonès, no acepta someterse a una cuestión de confianza tal como pactaron, una "opción" sería que convoque elecciones anticipadas para evaluar si cuenta con los apoyos necesarios.

La CUP y ERC pactaron en su acuerdo de investidura, que Aragonès se sometería a una cuestión de confianza a medio mandato. Según este acuerdo, el compromiso de someterse a esta cuestión tenía que servir no sólo para investirlo como president, sino también para sumar el apoyo de los cupaires a los próximos presupuestos de la Generalitat. Aragonès, sin embargo, ha rechazado someterse a la medida porque considera que la CUP "no tiene sobre la mesa" garantizar la estabilidad.

Para Reguant, "no es cierto eso de la estabilidad" pero "da igual" si la acordó con la CUP o no: "Es positivo que lo haga, y nosotros seguiremos defendiendo que la cuestión de confianza es necesaria". Ven en ello una "herramienta de democracia y transparencia". En caso de que no haya cuestión de confianza, una "opción" es que Aragonès convoque elecciones anticipadas, ha reiterado. Sin embargo, de momento en la CUP no se lo han planteado e insisten todavía en el cumplimiento del pacto inicial con ERC.

 

La diputada cree que el Govern "siempre, desde el primer momento" ha preferido a En Comú Podem por delante de la CUP a la hora de negociar presupuestos. De hecho, el ejecutivo aprobó las últimas cuentas con los diputados de Jéssica Albiach. "Que sean sinceros y honestos y que dejen de tratar a la gente como menores de edad. Que expliquen quiénes son sus socios y sus alianzas", ha exigido Reguant.

El líder del PSC, Salvador Illa, se ha abierto a Aragonès esta semana para aprobar los presupuestos del año que viene, en declaraciones a Catalunya Radio. Pero Aragonès, en una entrevista en la ACN, cerraba la puerta a los socialistas, y se orientaba hacia CUP y comuns. Reguant cree en este sentido que el president de la Generalitat "no necesita" negociar los números con Illa porque "en el día a día, con las políticas que impulsa, ya van de la mano". Y ve difícil que lo acaben pactando formalmente porque "se basan en la estética, y hay elecciones municipales el próximo año".

Preguntada por si las relaciones entre Govern y CUP son "reconducibles", la diputada dice que eso depende del Govern, pero no lo ve posible si sigue haciendo las políticas que ha hecho hasta ahora. Los cupaires querrían políticas "que vayan a la raíz de las cosas", en materia de vivienda o emergencia climática. "Nos habría gustado ver al Govern defender la Renta Básica Universal como ha defendido la candidatura de los Juegos Olímpicos de invierno", ha razonado.