Hace once meses, el gobierno de Quim Torra encargó a un grupo de expertos de disciplinas diversas que elaborara una guía sobre los pilares que tendrán que sostener la nueva normalidad pospandémica. Este jueves, el Grupo de Trabajo Catalunya 2022 ha presentado sus conclusiones. Se trata de 91 propuestas concretas agrupadas en tres ámbitos —social, económico y administrativo—. Están pensadas a 10 o 15 años vista y van desde un despliegue sostenible de las energías renovables a la garantía del derecho a la vivienda o la digitalización de la administración para acabar con la lentitud desesperante de la burocracia.

 

El mundo de ayer ha quebrado

El acto de presentación del informe Reset. Crida per reactivar el país, que ha contado con la participación de Pere Aragonès y de su predecesor, Quim Torra, que ha sido el primero en intervenir. El expresident ha confesado que en los meses más duros de la pandemia, "vivía con la certeza de que el mundo de ayer, de antes de la Covid, no volvería", porque "aquella manera de vivir había quebrado". El objetivo pasa ahora por aprender las lecciones y no volver a repetir los errores del pasado. "Si repitiéramos el mundo de ayer, volveríamos a fracasar", ha advertido Torra.

foto grupo Presentación de las conclusiones del Grupo de Trabajo Sergi Alcàzar
Aragonès y Torra con el grupo de trabajo. /. S. Alcàzar

Cuidar a los que cuidan

Entre los aspectos primordiales de las propuestas planteadas, está la lucha contra el cambio climático y proteger a todas aquellas personas encargadas de los cuidados, de cuidar a los ciudadanos. Así, por ejemplo, el documento entregado al Govern defiende la necesidad de que los trabajadores domésticos pasen a cotizar en la Seguridad Social. También se fija en el grave problema existente en relación a la vivienda. Y marca un objetivo, que dentro de 10 años haya un 10% de los pisos que sean públicos. El porcentaje actual es del 2%. Para llegar, expone medidas como priorizar la rehabilitación o el cambio de usos de locales comerciales ubicados en bajos y que ahora mismo están vacíos.

Otras propuestas destacadas tienen que ver con la digitalización. Para empezar, de la educación, pero también y sobre todo, de la administración pública, para hacerla más eficaz, eficiente y transparente. Para combatir las desigualdades, se introducen ideas como la ampliación de la renta garantizada o el despliegue de la fibra óptica por todo el territorio

En relación al cambio climático, se focaliza en la importancia de contar con fuentes propias de energía renovable, a través de la colaboración público-privada y con el impulso que tienen que suponer los fondos europeos Next Generation. Una de las medidas recogidas es incentivar fiscalmente las empresas y administraciones que den el paso a las renovables.

Los indultos no son la solución

Durante el discurso de clausura del acto, Aragonès se ha hecho suyas las propuestas, recordando su promesa de "sacudir el país" a través de cuatro revoluciones: la verde, la feminista, la social y la democrática.

El president ha querido dejar claro que la salida de la crisis no puede hacer olvidar la necesidad de resolver el conflicto político con el Estado. A pocas semanas de la concesión de los indultos por parte del consejo de ministros, ha avisado de que "el conflicto político que tenemos que abordar sin demora no acabaría sólo con los indultos". En este sentido, ha recordado que hay "exiliados y compañeros pendientes de juicio". Por todo ello, un día más ha insistido en que la solución pasa por la amnistía y la autodeterminación". Ha sido la primera referencia del presidente a este asunto desde el controvertido artículo de Oriol Junqueras avalando los indultos y cuestionando la unilateralidad.

En la imagen principal, el grupo de trabajo entrega el informe al president. / S. Alcàzar