La CUP ha recuperado este miércoles su sitio en la Mesa del Parlament mediante el diputado Carles Riera, que fue escogido la semana pasada como secretario tercero de la Mesa en sustitución del ahora exdiputado Pau Juvillà. Y la formación anticapitalista ha decidido recuperar su sitio marcando perfil, y es así como Riera ha presentado a la Mesa del Parlament, reunida desde las 9.00 horas de la mañana, una propuesta para regular las dietas de los diputados que pasa por el hecho de incorporar la totalidad de los gastos de representación al sueldo fijo de los parlamentarios, y que el incremento de gasto que eso suponga en concepto de IRPF sea asumida por los mismos diputados y no con el dinero de la Cámara.

En un comunicado, la formación anticapitalista explica que la propuesta para la regularización de estas dietas busca evitar que los diputados reciban un "aumento del salario encubierto" y por eso proponen que el incremento del gasto que suponga se asuma desde el mismo sueldo de los diputados. Además, cargan contra ERC, Junts y PSC por llevar meses "demorando esta cuestión", y con esta propuesta esperan que posicionen de una vez por todas.

La propuesta también propone específicamente que se deje de abonar una cantidad fija, como pasa hasta ahora, en concepto de gastos de viaje y desplazamiento, y sólo cubrir aquellos gastos debidamente justificados por parte de los diputados y diputadas: es decir, hasta ahora los parlamentarios cobraban una cantidad fija por viajes los hicieran o no, y la CUP reclama que sólo se paguen los viajes hechos y justificados.

 

Hace tiempo ya

Esta propuesta de la CUP llega a la Mesa no exenta de polémica. Hace tiempo que los anticapitalistas persiguen regular las dietas de los diputados, pero todavía lo lo han conseguido. A finales de enero y en plena polémica por las prejubilaciones privilegiadas de funcionarios -conocidas como licencias por edad-, el diputado de la CUP Xavier Pellicer exigió desde el atril de la Cámara que el revuelo sirviera también para abordar los privilegios de los diputados, y es así como instó a ERC, Junts y PSC a presentar una propuesta para reformar las dietas. Esta propuesta no acabó llegando.

Entonces fuentes de la oficina de la presidenta Laura Borràs explicaron que ella misma trabajó antes del verano del 2021 diferentes opciones de regularización de las dietas, una situación que desde la oficina de presidencia describían "como mínimo, anómala". Con esta voluntad, Borràs trasladó a la Mesa las diversas propuestas de cómo se tendría que modificar el pago de estos gastos de indemnización en razón de desplazamiento, pero no se llegó a ningún acuerdo.

La polémica en el presupuesto de la Cámara

El Parlament aprobó el octubre pasado el presupuesto de la Cámara a la espera de un acuerdo entre los grupos parlamentarios para concretar el cambio sobre cómo se pagaban estas dietas, y la discusión principal fue precisamente sobre si lo tenían que asumir los electos o la Cámara. CUP y comuns fueron los dos partidos más críticos con esta cuestión, y acabaron votando en contra del presupuesto.