Crece la presión de los partidos independentistas contra la presidenta del Parlament, Laura Borràs, a raíz de su caso judicial por la gestión al frente de la Institució de les Lletres Catalanes. ¿Qué piensa la CUP? Los cuperos declinan posicionarse y dicen que no tomarán posición hasta que los responsables de investir Borràs, ERC y Junts, digan cuál es su propuesta. Ahora bien, la formación anticapitalista asegura que "no puede haber un proyecto colectivo sometido a intereses individuales" y que el independentismo "no se puede permitir ninguna sombra de sospecha de corrupción". Así lo ha expresado en rueda de prensa el diputado Xavier Pellicer, pocos minutos después de la comparecencia de Borràs, donde la presidenta ha asegurado que no piensa abandonar su cargo y ha pedido al independentismo que no compre el relato de la "represión judicial".

"Ni la corrupción tiene que tapar la guerra sucia del estado, ni la guerra sucia del estado tiene que tapar la corrupción", ha dicho Pellicer, que ha recordado que como ERC y Junts fueron los responsables de investir a la presidenta del Parlament, tienen que ser ellos los qué digan qué propuesta tienen para abordar esta situación, que no es sobrevenida, y que ya sabían ambos partidos que posiblemente acabaría pasando ya que Borràs se presentó al cargo con la sombra de este caso judicial.

 

Fue la CUP quien el año 2017 introdujo al reglamento del Parlament el artículo 25.4, que apunta que un diputado tiene que perder sus derechos una vez se le abre juicio oral cuando es por casos de corrupción. Es este artículo que abrirá un pulso dentro del independentismo, dependiendo de si se activa o no este artículo una vez se le abra juicio oral a la presidenta Borràs. La CUP no dice con claridad qué posición tomará en la Mesa y prefiere ir paso a paso, pero mientras tanto, para estar lejos del foco en una polémica que consideran que no han generado ellos, esperarán que ERC y Junts se manifiesten: "La responsabilidad es de quien ha generado este escenario, que explique qué quieren hacer," ha insistido Pellicer, en que ha recordado que ellos no la votaron.

En su intervención, Borràs ha apuntado que no piensa dimitir, que es inocente y que no considera que el artículo 25.4 la afecte a ella, ya que considera que no ha cometido ningún delito. Mientras tanto, en Esquerra Republicana, de momento no han hecho ninguna intervención este martes, después del discurso de la presidenta. Si que el lunes Vilalta pidió a Borràs que conserve la honorabilidad de la institución y que no arrastre el proyecto independentista en todo este entramado, unas palabras que Borràs ha contestado pidiendo que no se utilice un caso judicial para apartarla judicialmente.