La CUP ha presentado su particular Procés Constituent hacia la República catalana. Un camino que ya han hecho llegar a entidades y a las fuerzas políticas independentistas con el fin de buscar el apoyo y empezar a trabajar después de Semana Santa, a pesar de que ya se encuentra en una fase inicial. En este camino que propone la izquierda anticapitalista, habría una primera fase pre-constituyente durante los próximos 16 meses. “Ya no vamos lentos”, ha defendido la cupaire Gabriel Serra. Y una segunda, que sería la constituyente.

Fase pre-constituyente 

En este periodo que durarà los siguientes 16 meses, proponen la creación de un Fòrum Social Constituent con representantes de la sociedad civil organizada, que estaría debajo el paraguas del Parlament, ya que, según plantea la CUP, este foro tendría que ser deliberativo, descentralizado, temático y propositivo. En concreto, sus decisiones serían vinculantes a la hora de redactar una propuesta de Constitución catalana  que no "sea de despacho, sino de base popular". El objetivo de esta plataforma, que se abrirá a todo el país, es debatir alrededor de siete ámbitos concretos:

  • Principios y elementos constitutivos de la República Catalana
  • Derechos, deberes y garantías
  • Participación ciudadana y organización política
  • Organización territorial
  • Modelo económico
  • Recursos naturales, medio ambiente y territorio
  • Relaciones internacionales y cultura de la paz

De esta plataforma, tendrían que salir dos propuestas de cada ámbito que se votarían en un referéndum múltiple. De aquí la necesidad de las instituciones como paraguas con el fin de recoger el modelo de país que salga del debate y que servirá de base para la carta magna catalana. Este referéndum sería el paso previo a la nueva fase.

Fase constituyente

Esta fase empezaría con unas elecciones constituyentes que serían autonómicas, pero de carácter plebiscitario. De hecho, la CUP defiende que si ganan los partidos independentistas será una DUI de facto. “No entremos en el debate del porcentaje”, ha dicho Mireia Boya, en referencia si habría que tener como mínimo el 50% de los votos. En este sentido, defiende que el mandato del 27S es muy claro y legitimado.

De estas elecciones constituyentes saldría una Assemblea Constituent que como “órgano soberano” no estaría sometido a ninguna ley anterior ni a ningún tribunal. En este momento, según la CUP será necesaria la ley de transitorietat jurídica, que tiene que empezar a redactarse en las ponencias conjuntas del Parlament. Esta Assemblea tendrá el mandato de hacer una propuesta de Constitución que incluya el mandato ciudadano salido del referéndum múltiple, como principios básicos. Entonces, la propuesta de Constitución se someterá a un referéndum ciudadano con el fin de ser ratificada. 

Los tempos

"No controlamos del todo el calendario". Así lo ha reconocido la cupera Gabriela Serra en cuanto a los 16 meses de la fase pre-constituyente. En este sentido, avisa que "el problema es que hay factores externos", en referencia a la respuesta que puede dar el Estado ante todo este proceso. No obstante, defiende que ellos trabajan con el objetivo de estos 16 meses, después "ya veremos", ha remarcado.