Escasos diez minutos. Este es el tiempo que han necesitado los grupos de Junts pel Sí y la CUP para llegar a un acuerdo sobre la reforma del reglamento que tiene que agilizar las leyes de desconexión.

El acuerdo se ha dado en la primera y última sesión de la ponencia conjunta, que ha finalizado con la elaboración de un informe que se convertirá en proposición de ley y que se trasladará a la Mesa del Parlament para que se tramite con carácter "de extraordinaria urgencia".

Este procedimiento reduce el periodo de los grupos parlamentarios para presentar enmiendas a cinco días y, por lo tanto, permitirá que la ley llegue antes al debate de la totalidad. El presidente de Junts pel Sí, Jordi Turull, ha asegurado a los medios en el Parlament que la decisión de tramitar la ley con carácter "de urgencia" garantiza de todos modos que los grupos dispongan de tiempo suficiente para decidir si presentan o no enmiendas a la totalidad.

Una vez superadas las enmiendas a la totalidad, se empezará el trámite de reforma del reglamento como proposición de ley ordinaria, con el correspondiente periodo de enmiendas y ponencias. Turull ha recordado que durante este periodo los grupos podrán presentar enmiendas, tanto sobre el texto de Junts pel Sí como sobre el reglamento en su conjunto.

De momento, se parte del texto inicial de reforma del reglamento presentado por Junts pel Sí y, según ya han acordado con la CUP, irán trabajando el documento hasta que se produzca el plazo de enmiendas. De hecho, la formación anticapitalista ya ha confirmado que presentará varias enmiendas al texto inicial y que harán suyas algunas de las reivindicaciones de la legislatura y demandas de los grupos sociales.

Asimismo, desde Junts pel Sí quieren facilitar que el resto de grupos participen en el periodo de enmiendas. Cataluña Sí Que es Pot aseguró que, a pesar de que no participaría en la ponencia conjunta -como así ha sido-, pero que sí lo haría en el periodo de enmiendas.

Turull ha asegurado que el debate a la totalidad se podría hacer "en el próximo pleno o el otro" y que, con todo, la aprobación de la reforma del reglamento pueda darse "a finales de mayo o principios de junio" como tarde.

La reforma del reglamento permitirá aprobar leyes por el trámite de lectura única, a instancias de un solo grupo. Este mecanismo estaba hasta ahora reservado al Govern o, en caso de ser proposición de ley, tenía que estar firmado por todos los grupos de la cámara.

La ponencia conjunta ha condado con la presencia de los diputados de Junts pel Sí Jordi Turull y Roger Torrent; la presidenta de la CUP, Mireia Boya; la presidenta de la Mesa, Carme Forcadell; el secretario general del Parlament, Xavier Muro; el letrado mayor, Antoni Bayona, y una asesora lingüística.

La oposición contra la ponencia

El principal grupo de la oposcición, Ciudadanos, y el PP catalán han puesto de manifiesto su desacuerdo con el procedimiento seguido por Junts pel Sí, tanto a la hora de crear una ponencia conjunta con dos de los seis grupos parlamentarios como la brevedad de la reunión. El portavoz de Ciudadanos, Carlos Carrizosa, ha lamentado que se utilice al Parlament para "ocultar una ley que Junts pel Sí y la CUP guardan en un cajón".

A pesar de estar en contra de la ponencia conjunta constituida este viernes, Carrizosa ha asegurado que una vez se lleve la iniciativa al pleno "allí se tendrá que debatir". Eso sí, según consideran desde Cs el debate de la ley se hará "ultra rápido para acortar plazos" y que la oposición tenga menos tiempo de reacción.

La diputada del PP Andrea Levy no se ha pronunciado sobre si su grupo participará o no en el debate de la proposición de ley pero ha criticado la actuación de Junts pel Sí sobre la reforma del reglamento. "Junts pel Sí y la CUP han finiquitado en diez minutos el reglamento de todos los diputados", ha lamentado la diputada. Preguntada sobre si lo recurrirán al Tribunal Constitucional, Levy ha advertido que desde el PP estarán "vigilantes" a todo aquello que "atropelle la democracia".