La píldora de campaña de JxCat iba, este jueves, de cultura. Por eso han preparado una comparecencia de la candidata Laura Borràs, exconsellera de Cultura, con su sucesora Mariàngela Vilallonga y su predecesor, el extitular del ramo Lluís Puig, en conexión desde Bruselas. Pocas horas antes de empezar se ha conocido la sentencia del Tribunal Constitucional sobre la Ley de Educación de Catalunya, que avala la inmersión lingüística pero que decapita algunos de sus puntos.

Quien se ha expresado con más contundencia es Lluís Puig, además de exconseller de Puigdemont, cabeza de lista del Senado por JxCat. "Constatamos que hay una persecución ideológica del Estado que no tiene límites y no les importa lo más mínimo poner en peligro la cohesión social, la protección de los niños y el éxito educativo y profesional de los jóvenes", ha denunciado. Pero no se ha quedado ahí, "es peligroso perseguir ideológicamente". Puig ha hecho un cóctel entre la sentencia del TC sobre la LEC y la prohibición de la Junta Electoral Central a los medios de comunicación públicos para que utilicen los conceptos de presos políticos y exiliados. Su conclusión es que cuando un Estado adopta estas actitudes, "te falta medio metro para ser una dictadura al 100%".

A pesar de todo, JxCat considera que la decisión del Tribunal Constitucional puede leerse también como un "fracaso para el PP", que fue quien presentó el recurso, en el año 2009. "Iban contra 53 puntos y el TC nos dice que no lo hacemos bien en 7," ha señalado Puig, que ha aprovechado para recordar que la LEC "se aprobó, pactó y negoció incluso con un partido del 155, el PSC." Y ha rematado con un lamento, "quien te ha visto y quien te ve, amigo del PSC".

Durante su intervención, Borràs ha puesto otros ejemplos de esta "persecución ideológica" que denuncia su candidatura. Es el caso de que a pesar de definirse como "estado plurinacional", en España "no permiten el uso del catalán en sus instituciones, el Congreso y el Senado".