La Comisión Permanente del Consejo General del Poder Judicial cierra filas en torno al juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena y podría comunicar hoy mismo un acuerdo respecto a la petición de amparo hecha por el instructor del caso 1-O ante la querella presentada en Bélgica por miembros del Govern exiliados con el objetivo de evitar que Llarena acuda a declarar el 4 de septiembre ante un tribunal belga.

Así lo asegura ‘El Español’, que apunta que el CGPJ asume la teoría de Llarena según la cual la demanda civil interpuesta por Carles Puigdemont, Clara Ponsatí, Toni Comín y Lluís Puig contra él en Bélgica es "un ataque planificado a las condiciones de independencia en las que desarrollo mi labor" porque "se pretende que sea un tribunal belga el que examine la corrección" de la instrucción.

Por ello, el CGPJ estaría dispuesto a otorgar el amparo a Llarena y, a la vez, adoptar "todas las medidas necesarias para asegurar las condiciones propias de dicho marco de independencia y seguridad”, y una de ellas sería “instar” a los miembros del Govern en el exilio “al cese o la abstención en el futuro, de cualquier acto que perturbe el ejercicio independiente de la función jurisdiccional del magistrado".