Después de 453 noches en la prisión, las reflexiones e ideas del presidente de ERC, Oriol Junqueras, han vuelto a resonar en el gran acto que se ha celebrado este martes por la noche en el Sant Jordi Club. Lo ha hecho a través de un holograma y con la voz de su hermano, muy parecido a la del vicepresidente encarcelado, así como también la de otras personalidades. El acto, que ha reunido hasta 2.500 personas y ha contado con la presencia de numerosas personalidades, ha servido a Esquerra para hacer una demostración de fuerza y marcar perfil propio, a una semana del juicio del 1-O y pocos meses antes de las elecciones europeas y municipales.

Durante su discurso, Junqueras ha lanzado un mensaje a la Crida, el espacio impulsado por Carles Puigdemont y Jordi Sànchez, y constituida este fin de semana y ha defendido que los republicanos no piensan renunciar nunca a "extender la mano en estos espacios políticos diversos con los cuales compartimos altos ideales", en referencia a los comunes y dando un mensaje claro a los llamamientos del espacio de Puigdemont a la unidad electoral. ERC tiene su propio proyecto y quiere seguir marcando perfil propio como el independentismo "abierto y efectivo" y que puede construir "articular políticamente mayorías amplias de hasta el 80% sumando y tejiendo complicidades" con varios espacios políticos.

La conferencia ha sido leída, demás de por el hermano de Junqueras, por otras personalidades que van desde Empar Molier hasta Joan Ignasi Elena, pasando por republicanos como la diputada Najat Driouech, el candidato a la alcaldía de Barcelona, Ernest Maragall, y número dos a las europeas y pareja de Raül Romeva, Diana Riba.

El líder de los republicanos ha defendido que Esquerra Repúblicana quiere "construir mayorías democráticas, progresistas y republicanas inapelables como paso indispensable en el proyecto de construcción republicana" y ha defendido que no piensa "renunciar nunca" a "extender la mano a estos espacios políticos diversos con los cuales compartimos altos ideales" con el fin de "sumar", "fortalecernos" y "ganar el país". En este sentido ha apostado por "construir estas mayorías estirando a ambos lados", situándose en el centro del espectro político entre Crida y comunes y CUP.

Apuesta por "nuevas alianzas" para encontrar uno nuevo "cómo y cuándo"

Por todo eso, ha apostado por construir una "mayoría republicana" y por volver a tejer las alianzas "entre el independentismo y todas las fuerzas partidarias del derecho a decidir". "El 1-O, el gran hito de estos últimos años, es inexplicable sin estas alianzas", ha defendido, apelando al espíritu del 3-O. "Tenemos que encontrar y encontraremos, uno nuevo cómo y uno nuevo cuándo que hagan democráticamente posible la República catalana", ha defendido.

Con respecto al futuro del proyecto independentista, Junqueras ha defendido que el "mejor instrumento es un referéndum, que tiene que ser reconocido para la propia ciudadanía y verificable a nivel internacional." Sin embargo, ha reconocido que "el estado no se sentará a negociar por voluntad propia, porque nunca lo ha hecho, "sino que ha defendido que habrá que crear las condiciones necesarias para que lo haga y asuma que la solución es política y democrática.

Con todo, sin embargo, ha dejado la puerta abierta a "no renunciar a ninguna vía democrática y pacífica para alcanzar la República Catalana como Estado independiente". "Si hace falta, apostando por la vía de la movilización masiva y la desobediencia civil", ha añadido, recordando referentes como Martin Luther King o Mahatma Gandhi.

conferencia Junqueras 29 de enero - Sergi Alcàzar

"Es cuestión de tiempo que el régimen acabe cayendo"

Además, a las puertas del juicio del 1-O, ha expuesto las líneas generales de su defensa durante este proceso. En este sentido, Junqueras se ha mostrado convencido que "sólo es cuestión de tiempo que el régimen acabe cayendo" porque "a nosotros nos encarcelarán pero las ideas persisten y no podrán hacer pensar diferente además de 2 millones de catalanes". "¿Hasta cuándo retendrán a todo un pueblo por la fuerza?", se ha preguntado, a lo que ha añadido que si tienen que recurrir a la represión "para evitar que el pueblo y la democracia decida qué futuro quiere, es que realmente están perdidos".

Además, ha defendido que el proceso independentista "es la mayor amenaza que ha existido en contra del poder de la oligarquía española, en contra de los privilegios políticos y en contra de statu quo" y que "detrás de su discurso de la unidad de España, ha escondido el interés puro y duro de mantener los privilegios de unos pocos: de la clase política y económica del Estado español".

También ha defendido que durante el juicio plantará cara al "régimen del 78" y ha avisado de que si la involución democrática no se detiene, "al final nos acabará afectando a todos los demócratas".

El Estado acabará "en el banquillo de los acusados"

Junqueras ha asegurado que no se arrepiente de nada, sino que se siente "legítimamente orgulloso" y ha defendido que si la prisión es el precio que tenemos que pagar por la libertad lo pagaremos. El líder de los republicanos se ha mostrado convencido de que el Estado no se podrá resistir "a una sentencia ejemplarmente dura" porque "les mueve la venganza".

Sin embargo, se ha mostrado convencido de que el Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo les acabará dando la razón. "Haremos que quien acabe en el banquillo de los acusados sea el Estado", ha asegurado, añadiendo que: "pondremos un espejo ante el Estado para que todo el mundo conozca su cara más oscura".

Según Junqueras, "cada día que nos mantienen en la prisión, nuestro movimiento se hace mayor, más fuerte, más creíble y más invencible" y ha afirmado que la represión sólo demuestra "la absoluta debilidad del Estado". "Si creían que con la represión, las amenazas y encarcelandonos retrocederíamos o cambiaríamos, no nos conocen, ni a nosotros ni al pueblo catalán".

conferencia Junqueras 29 de enero - Sergi Alcàzar

Las municipales, una nueva "prueba de fuego"

Sobre las elecciones municipales, Junqueras asegura que son una "nueva oportunidad" para "fortalecer las instituciones a nivel local y reagrupar fuerzas" que tienen que servir por "construir mayorías republicanas". Así, defiende que "hay que fortalecerse en todos y cada uno de los municipios, muy especialmente en las regiones metropolitanas y a la capital del país". En este sentido, sitúa estas elecciones como "una prueba de fuego" para hacer de Barcelona la "capital de la Catalunya republicana" y un "referente de la lucha para la libertad".

En este sentido, defiende la candidatura de Ernest Maragall en la capital catalana porque asegura que representa una ciudad "orgullosa y solidaria", "baluarte de la defensa de los derechos y las libertades" y una "capital del mundo que quiere brillar con luz propia".

También sobre elecciones, pero en este caso las europeas, de las que es candidato, Junqueras ha defendido que "nos jugamos la defensa de la democracia, la libertad, los derechos fundamentales de todas las personas". Además, ha asegurado que tienen que servir para "poner un espejo al Estado y que Europa se dé cuenta de cómo es verdaderamente España". Así, "podremos colocarnos al lado de demócratas europeos, como hemos hecho en otros momentos históricos", ha defendido al líder de ERC en esta conferencia escrita desde Lledoners.

La conferencia ha acabado con un ruego. Ante el "juicio sumarísimo" y de la "suma de peticiones de centenares de años de prisión", Junqueras ha pedido que no haya "llantos" ni "lamentos" y ha reclamado perseverancia y que nadie tenga ninguna duda que "más temprano que tarde se dibujará una sonrisa que será eterna en los ojos de toda la buena gente". "Os necesitamos enérgicamente ilusionados, como lo estabais antes del 1 de octubre", ha defendido, a lo que ha añadido: "somos la semilla de todas las victorias. Ganaremos!".

Conferencia Junqueras 29 de enero - Sergi Alcàzar

A la conferencia, además de la plana mayor de ERC, han asistido representando otros partidos como Eduard Pujol (JxCat), Elisenda Alemany y Joan Josep Nuet (Comuns), Carles Riera (CUP), así como también Marcel Mauri (Òmnium) y Jordi Ollé (ANC) y algunos de los familiares de los presos, entre otras persoonalidades.