Las defensas han reservado al último testimonio de esta semana para un policía del CNP jubilado que participó en las votaciones en Sant Joan de Vilatorrada y formó parte de una mesa, Nemesio Fuentes. Durante la declaración ha explicado la entrada de la Guardia Civil al colegio electoral sin ningún tipo de advertencia previa y destrozando la puerta con una maza.

"Si hubieran preguntado les habríamos explicado que la puerta se cerraba hacia afuera y no hacia adentro, y que no estaba cerrada con llave", ha explicado el agente, lo cual ha provocado risas entre el público y el primer aviso de la auxiliar judicial reclamando silencio.

El agente jubilado estaba dentro del colegio cuando entró la policía y ha atribuido la caída del primer Guardia Civil que consiguió entrar en la escuela no a la silla que le lanzó una de las personas que estaban dentro sino en los cristales rotos que habían quedado por el suelo en forzar la puerta a golpes.

Ha asegurado que no hubo violencia; que la gente aceptó que entraran porque no podían hacer ninguna otra cosa; que cuando los agentes llegaron interrumpieron las votaciones. Ha relatado que la gente corría y que la Guardia Civil empezó a pegar a los concentrados para poder llegar hasta la puerta, mientras él lo contemplaba a través del cristal dentro de la escuela. Sus tres hijos estaban fuera y dos resultaron lesionados. Su mujer también estaba fuera.

"En ningún momento ningún guardia civil, yo estaba a un metro, dijo ni preguntó nada para ver si se podía solucionar de otra manera", ha recordado.

Cuando se le ha preguntado quién le designó como voluntario para ayudar en las votaciones ha replicado con un "no me designó nadie, me designé yo mismo", que ha provocado otra vez risas entre el público y un aviso del presidente de la sala, Manuel Marchena.

"Dado que no había personal nombrado para poder constituir las mesas, alguien tenía que salir y varios vecinos lo decidimos, y de común acuerdo, las constituimos", ha explicado. El fiscal ha repreguntado si el objetivo era organizar las mesas y el expolicía ha respondido directo cual era el propósito: "permitir que se pudiera votar".

El agente jubilado ha admitido conocer las órdenes del TC y del TSJC, pero también que en el párrafo dos de las instrucciones del juez se reclama que las acciones policiales se hicieran sin alterar la normal convivencia ciudadana.