Albert Carbonell, director del Port de Barcelona, ha comparecido hoy como testigo en el juicio al procés. Aunque su testifical estaba prevista para el 13 de mayo, se ha personado hoy por motivos de agenda.

Carbonell ha sido citado por Jordi Pina, abogado de Josep Rull, para que verificara si realmente se negó o no desde el Govern el atraco de dos barcos que alojaban a los refuerzos de los policías que tenían que actuar el 1-O.

"Se denegó porque la ley de puertos no lo permite y es restrictiva con los barcos-hotel", ha dicho ratificando y coincidiendo totalmente con las explicaciones que dio Josep Rull durante su declaración como acusado en el juicio.

"Ports de la Generalitat rechazó la entrada de aquella nave como hubiera rechazado la entrada de cualquier otra. No utilizó los mecanismos establecidos para solicitar la entrada en un puerto. Ordinariamente, se gestiona a través de una plataforma digital. Se tiene que hacer una solicitud formal", dijo Rull el 20 de febrero.

Hoy el director del Port ha ratificado estas declaraciones responsabilizándose de todas las decisiones que se tomaron. Carbonell ha explicado que cuando el Gobierno notificó que era un buque de Estado, se autorizó la entrada a puerto. El permiso de entrada no se había hecho informando de a quién transportaba ni quién había alquilado el barco.

Carbonell ha explicado que no es hasta el 19 de septiembre que el Estado no informa de quién va dentro del buque, una vez se denegaron los permisos. También ha explicado que no tenía conocimiento en ese momento de por qué se denegó la entrada del barco en el puerto de Palamós.