Hoy han declarado los primeros agentes de los Mossos d'Esquadra que estuvieron presentes en los registros que se hicieron antes y durante el 20 de septiembre.

Uno de los heridos el 20-S en Sabadell durante la detención de Ignasi Sànchez es el mosso 2038, que ha relatado que a ellos también les llamaron de todo: "Fascistas, botiflers, de todo menos guapos". "Había gente que insultaba y también había que daba patadas", ha proseguido. También ha explicado que se hizo daño en una mano cuando cayó al suelo.

Ha cuantificado en 700 a las personas que estaban concentradas delante de casa de Sànchez, cargo de la Conselleria de Governació, y que un centenar eran los más representativos y más "agresivos", ha dicho concretamente. Hubo hasta tres embestidas y lo que ha calificado de "típico momento de tensión fuerte que tienes que aguantar para cumplir el objetivo que era que saliera la comitiva judicial".

El otro mosso, el 3719, ha explicado que unas 70 personas "tenían una actitud muy violenta" hacia la Guardia Civil y los Mossos. "Hubo patadas, puñetazos, empujones e incluso uno de ellos golpeó con un casco a varios agentes de la ARRO", ha relatado. Y además ha añadido: "Había una parte de la masa que quiso bloquear la acción policial y que en mi opinión estaban dirigidos por alguien". Este mosso se rompió un dedo apartando a la masa.

El relato de los dos es similar. Sólo discrepan en si alguien dirigía la manifestación o no. Los mossos han explicado los hechos prácticamente con el mismo relato que los guardias civiles.