Manel Castellví, que fue jefe de la Comisaría General de Información de los Mossos, había de ressituar los hechos en contraposición con los que han relatado los responsables del CNP y la Guardia Civil. Pero a Castellví le ha faltado precisión y los nervios han provocado que su testigo no haya sido clave para la defensa de nadie, al contrario.

El comisario era el jefe de la comisario general de información cuando los Mossos llevaron documentos a la incineradora de Sant Adrià. Un caso, que finalmente se archivó.

Castellví ha puesto sobre la mesa por primera vez el término "independentismo radical" y ha expuesto que temían que se apoderara de la situación. Pero la parte más devastadora de la declaración ha llegado al final, a preguntas de la abogada del Estado, cuando ha dicho que advirtió en una reunión con Carles Puigdemont, Oriol Junqueras, Joaquim Forn y la cúpula de los Mossos con el Mayor Josep Lluís Trapero al frente que podía haber una "escalada de violencia".

Ha sido el colofón final de una declaración que ha ido mal, para los acusados, desde el primer momento. Un comisario de los Mossos que se ha mostrado extremadamente nervioso y que ha querido eximir de responsabilidades el cuerpo policial alimentando las tesis de las acusaciones. Después de las declaraciones de la mañana de los responsables en Catalunya del CNP y la Guardia Civil, Sebastián Trapote y Angel Gozalo, que han cargado contra Forn, Trapero y los Mossos y que han hablado de la "pasividad de los Mossos" y el lanzamiento de objetos de la ciudadanía, el testigo de Castellví sólo ha reforzado esta versión.

El comisario ha llegado a decir que salió "frustrado" de la reunión que mantuvo con el Gobierno donde se comunicó que el referéndum saldría adelante. Sólo ha salvado Oriol Junqueras: "Junqueras entendía la posición de los Mossos, pero la sensación era que el Gobierno quería que se celebrara el referéndum".

Sobre la posición de Joaquim Forn, Manel Castellví ha dicho que el conseller de Interior dijo que "el 1-O sería una jornada normal, como si se celebrara un referéndum normal". "Dejamos claro que nosotros acataríamos el auto de la magistrada del TSJC que prohibía el referéndum", ha concluido.

La bancada de las defensas con Forn detrás ha seguido con estupefacción la declaración. Castellví todavía noha recién declarado. Lo hará el lunes y tendrá que responder las defensas que mirarán de reconduïr la situación.

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"El auto también decía que la tarea de cerrar colegios también estaba dirigida a la Guardia Civil y la policía española" y ha remarcado que había activados unos 11.000 agentes, de los cuales, 7.800 mossos estaban destinados al dispositivo del 1-O. Los Mossos impidieron que abrieran 239 locales y cerraron 134. Castellví ha explicado que durante todo el día "trabajaron en 2.259 centros con 7.850 agentes al operativo".

Castellví ha negado la contravigilancia a la policía española: "No se hizo seguimiento de las actuaciones y movimientos de Guardia Civil y policía". Pero después ha admitido que sí que comunicaban si veían movimientos.

El comisario ha quedado atrapado en las preguntas de la fiscalía sobre el "independentismo revolucionario" que consta en los informes y que se refiere a grupos minoritarios radicales: "Durante el 1-O teníamos la preocupación que se infiltraran 'independentistas revolucionarios' en los colegios".

Los días previos

El mes de septiembre en Catalunya hubo unas 300 manifestaciones aproximadamente.

"Nos llevó mucho trabajo hacer los informes de riesgo en relación al 1-O, el 11-S y el 12 de octubre", ha explicado Manel Castellví que en aquel momento era el jefe de la Comisaría General de Información y ha concretado que había tres objetivos: los movimientos radicales, los movimientos independentistas y los movimientos de la extrema derecha.

"Els CDR les detectamos por redes sociales el mes de junio del 2017. El primer CDR es del mes de abril," ha respondido Castellví a preguntas de la fiscalía. "El propósito de estos grupos eran acciones para promover los referéndums, desde una chocolatada hasta una asamblea. La organización estaba más dedicada a retuitear", ha concretado.