La sesión de este martes se desarrollaba con normalidad, con el inspector 088009 del Cuerpo Nacional de la Policía (CNP) explicando sus intervenciones en el distrito de las Corts de Barcelona cuando el tribunal ha comenzado a removerse inquieto. De repente el presidente de la sala, Manuel Marchena, ha reclamado la presencia del forense para asistir a Paco. "Por favor, el doctor, el médico," ha reclamado para ordenar acto seguido el desalojo de la sala.

Paco es uno de los auxiliares judiciales, encargado de gestionar con su ordenador las pruebas concentradas en la nube, donde se almacena toda la documentación de la instrucción del proceso. Responsable por lo tanto, de la proyección de los vídeos. No debe haber sido la sobrecarga de trabajo en estas sesiones lo que le ha provocado la indisposición. El hombre está parapetado tras un armario para evitar aparecer en la retransmisión del juicio y, a pesar de todo, esta mañana se ha convertido en protagonista cuando, de repente, ha sentido una sensación de ahogo.

Finalmente se ha levantado por su propio pie y ha abandonado la sala para ser asistido por el médico. Pero la alarma por Paco se ha extendido por los pasillos del Supremo hasta que se ha reanudado la sesión al cabo de unos minutos.

"Paco es una pieza indispensable. Se ha sentido indispuesto, pero afortunadamente ya está bien", ha anunciado satisfecho Marchena cuando se ha reiniciado el juicio. No és una observación retórica: una indisposición de Paco podría provocar una suspensión del juicio.

Murallas de andadores

La escena se ha producido mientras el agente 088009 explicaba las actuaciones en uno de los colegios de Les Corts donde fueron advertidos por uno de los presentes que no podían hacer cargas porque había personas mayores y niños. 

"Y había niños?", ha preguntado el fiscal Javier Zaragoza. "Niños no vi, pero personas mayores sí, incluso con tiki-taka, no sé cómo se dice, artilugios de aquellos para que personas mayores puedan andar", ha relatado.