El veto del gobierno de Mariano Rajoy con el apoyo del PSOE y Cs al nombramiento del nuevo Govern para incluir consellers presos o en el exilio ha dado todavía más fuerza a algunos dirigentes políticos como, por ejemplo, Josep Rull, que después de que el president Quim Torra ayer visitara a los presos políticos a todas las prisiones de Madrid ha decidido cambiarse la descripción de su perfil de Twitter y se ha añadido "preso político, rehén del Estado español en la prisión de Estremera".

El conseller Jordi Turull también ha modificado su perfil, pero lo ha hecho en un tono más suave: "El president Torra me ha nombrado conseller de la Presidència", ha pedido que le escribieran.

De hecho, durante la visita de Torra, tanto Rull como Turull le trasladaron su voluntad de acceder al cargo y, por lo tanto, asumir de nuevo las conselleries de Territorio y Sostenibilitad, y Presidència, respectivamente e, incluso, lo hicieron vestidos con americana y con la insignia de consellers de la Generalitat en la solapa.

Rull recordó que "tenemos nuestro derecho político intacto y pedimos nuestra libertad para ejercer la responsabilidad que nos ha encomendado y que aceptamos".

Además, el sábado también subrayó que "no publicar nuestro nombramiento es prevaricación, simplemente" y se cuestionó "¿desde cuándo la prisión preventiva por rebelión inexistente es una condena firme?".

"Los consellers me han manifestado la voluntad de estar el miércoles en Barcelona para prometer el cargo y tomar posesión", aseguró el president de la Generalitat, al mismo tiempo que aprovechó la ocasión para no darse por vencido y volver a emplazar tanto al gobierno del PP, como el PSOE a sentarse y hablar "de una vez y solucionamos una situación que no se tendría que haber producido".

Los consellers de Salut y de Cultura en el exilio, Toni Comín y Lluís Puig, mantienen, de su lado, su cargo en su perfil de Twitter.