Un centenar de agentes de la Guardia Civil se han desplegado en Girona por órdenes del Ministerio del Interior con la misión de detectar y detener a Carles Puigdemont ante la posibilidad de que intente entrar en el país para asistir a la sesión de investidura la próxima semana.

Se trata de efectivos del Grupo de Reserva y de las Unidades de Seguridad Ciudadana de la policía militarizada desplazados expresamente desde Sevilla, según adelantó el miércoles la Cadena Ser.

Este despliegue se suma al incremento de la actividad tanto de la Guardia Civil como de la policía española. Agentes del CNP llevan días vigilando todos los accesos del parque de la Ciutadella y han llegado a revisar las alcantarillas, con el objetivo de evitar que el candidato a la investidura, Carles Puigdemont, pueda acceder al Parlament de Catalunya, donde sería investido nuevamente como president de la Generalitat.