Ya son más de 435.000 personas las que se han inscrito a la manifestación de la Diada organizada por la Assemblea Nacional Catalana. Cé Casabella, miembro de la entidad independentista, ha explicat al 'Via Lliure' de RAC1 que, aunque las inscripciones se abrieron un poco más tarde que el año pasado, el ritmo de inscritos "ha escalado de repente" en los últimos días y ya supera las cifras del año pasado por estas fechas.

Casabella se ha mostrado confiada que será "una de las manifestaciones más masivas" que se han celebrado. "El ritmo es muy alto, hay más autocares, más inscritos y se han vendido más camisetas", ha insistido. A cifras de este sábado por la noche, había más de 1.340 autocares confirmados y se habían vendido más de 260.000 camisetas.

Como en ediciones anteriores, se ha puesto en marcha un procedimiento de inscripción a través de internet y un mapa que permite comprobar cómo se van llenando los tramos de la manifestación. De los 37 tramos en que se dividirá la concentración, ya hay nueve de llenos. Del resto, veintiuno están casi llenos y siete tienen una ocupación muy alta. La zona donde hay más disponibilidad a estas alturas es la que va desde la plaza Francesc Macià hasta Palau Reial, donde se sitúan los tramos más anchos.

Desde la ANC remarcan que es importante inscribirse previamente para facilitar la organización. Los asistentes tendrán que facilitar los datos personales y seleccionar el tramo según la comarca de procedencia.

En cuanto a las camisetas, de color coral, en alusión a las bridas de las urnas del referéndum del 1-O, se pueden adquirir a través de las asambleas territoriales o a la sede central de la ANC (Calle Marina, 315) de 10h a 14h y de 16h a 20h.

El objetivo de este año es crear una ola sonora gigante que recurrirá de punta a punta la Diagonal. A las 17.14 los manifestantes tendrán que hacer un silencio absoluto y bajar pancartas y banderas. A continuación, se dará el disparo de salida a la gran ola, que empezará en el tramo 37, a la altura de la calle de Castillejos, y se extenderá hasta el Palau Real. A medida que avance, los manifestantes tendrán que levantar las pancartas y gritar. Con esta acción se simbolizará el clamor de la sociedad para hacer efectivo el mandato del 1-O.