El Congreso de los Diputados se asoma este jueves a una votación de infarto para escoger la Mesa del Congreso, el trámite inicial de la decimoquinta legislatura española. Será una elección extremadamente igualada, con altas dosis de suspense y que requerirá de una coordinación quirúrgica entre los grupos parlamentarios. Un error o un descuido puede hacer cambiar el color político. Ante un escenario en el que reina la incertidumbre, el PSOE presentará a Francina Armengol como candidata para la presidencia, mientras que el PP optará por Cuca Gamarra. Faltan pocas horas para la votación y los negociadores apuran las últimas conversaciones. A estas alturas de la película, el bloque de la izquierda y el de la derecha están empatados a 171 escaños, por lo que los siete diputados de Junts y, de rebote, la diputada de Coalición Canaria tienen la sartén por el mango.

El frenesí se ha notado este miércoles en la cámara baja. Se intuye el nerviosismo entre los partidos que dominan la arena política española. El tiempo apremia y nadie tiene garantizada una mayoría para controlar el órgano de gobierno de la vida parlamentaria, tan agitada y reñida desde los resultados de las elecciones del 23 de julio. Lo que suceda este jueves será un síntoma o una declaración de intenciones de todos los implicados de cara a una hipotética investidura o una posible repetición electoral. Antes de que arranque la sesión constitutiva a las 10 de la mañana, el Congreso sintonizará la ejecutiva que Junts ha convocado para este jueves dos horas antes.

Sánchez seduce con el catalán

La estrategia de seducción de Pedro Sánchez con Junts arrancó con la elección de Francina Armengol para sustituir a Meritxell Batet, y este miércoles ha mantenido los gestos comprometiéndose a impulsar el uso del catalán en las instituciones europeas. "Impulsaremos su uso en las instituciones comunitarias como un compromiso que desplegaré durante la presidencia española de la Unión Europea", ha anunciado este miércoles. Ahora bien, tal y como ha señalado en un tuit la secretaria general de Esquerra, a Marta Rovira, la propuesta de promover las lenguas cooficiales en Europa no es nueva, ni mucho menos, porque los gobiernos catalán y español ya lo pactaron en la mesa de diálogo reunida en julio de 2022.

Sánchez se ha desplazado este miércoles al mediodía al Congreso de los Diputados para arengar a sus diputados, a quienes ha encomendado ser "la voz de alerta" contra la suma "involucionista" del PP y Vox. Tres cuartos de lo mismo ha hecho Alberto Núñez Feijóo esta tarde. En un discurso donde se ha reivindicado como vencedor de las elecciones, el líder del PP se ha mostrado convencido de que el rey Felipe VI le encomendará presentarse a la investidura como ganador de las elecciones. Cree que tiene la legitimidad. "El jefe de Estado actuará como ha hecho siempre, de acuerdo con la ley, ejerciendo las competencias constitucionales y solo al servicio de los españoles", ha afirmado el gallego. El PP calcula que cuenta con "171-172 diputados" que son superiores a la mayoría que todavía tiene que armar Pedro Sánchez, "con partidos que quieren romper España".

¿Por qué son importantes los votos de Junts?

Para entender la importancia de los votos de Junts, hay que sacar la calculadora. El bloque de la izquierda aglutina los 121 del PSOE, los 31 de Sumar, los probables 7 de ERC, los 6 de Bildu, los también presumibles 5 del PNV y el solitario del BNG. Ante sí, tendrán los 137 del PP, los 33 de Vox y el diputado de Unión del Pueblo Navarro. 171 contra 171. Nadie obtendría mayoría absoluta en primera ronda y la balanza debería inclinarse por mayoría simple en la segunda votación. En esta suma diabólica tan solo falta contar los 7 de Junts y la diputada de Coalición Canaria (CC). El apoyo de los de Carles Puigdemont a Francina Armengol resolvería la ecuación, pero una abstención de Junts haría imprescindible el voto de los canarios para desencallar la situación.

Conviene recordar que Coalición Canaria acaba de firmar un acuerdo de coalición con el PP para un gobierno regional insular tras las elecciones autonómicas del 28 de mayo. En este contexto, los dirigentes de CC apuestan por que el PNV obtengan un sitio en la Mesa para romper la dinámica de bloques, sin distinguir a quién han ofrecido esta posibilidad, si al PSOE o al PP. Los socialistas la descartan. Si CC vota a Gamarra y Junts se abstiene, la presidencia iría a parar a manos del PP. En cambio, si los canarios no desempataran y se perpetuara el empate de forma indefinida, el reglamento de la cámara establece que debe repetirse la votación entre los dos candidatos hasta que uno obtenga más apoyos que el otro.