Pese al desconcierto por la marcha de Marta Rovira, y la ausencia en la comparecencia ante el juez Pablo Llarena, el independentismo no ha dudado en cerrar filas con la dirigente de ERC a las puertas del Tribunal Supremo, alegando la situación de "injusticia" por la "causa general" que acusan al Estado de emprender contra el proceso soberanista. Las caras de los políticos movilizados buscaban en todo momento, si bien, mostrar cualquier sentimiento que distara de la comprensión sentida, y ha sido Joan Tardà quien ha hecho la expresión de mayor sorpresa, nada más al conocer la decisión.

"Haga lo que haga Marta Rovira, yo la respetaré siempre" la defendió Gabriel Rufián, número dos de ERC en el Congreso. "Los que se fugan son los corruptos, no los demócratas, que es gente que tiene todo el derecho a hacer lo que quiera hacer ante un Estado que les persigue de manera injusta y vengativa" ha zanjado.

Eso sí, sobre cómo eso afectaría a la dirección de la formación, Rufián ha hecho un llamamiento a la calma. "Tengo el honor de representar a un partido con 87 años de historia impoluta, en el Congreso, y puedo asegurar que hay un montón de gente que lo haría mucho mejor que nosotros. Que nadie se preocupe de que el liderazgo de Esquerra está garantizado" ha cerrado.

Además de Rufián, la comitiva republicana estaba formada por Sergi Sabrià, Isaac Peraire, Tardà, Jordán, Ester Capella y Jordi Salvador, los senadores; Mirella Cortés, Bernat Picornell, Quim Ayats, Elisenda Pèrez, Anna Azamar, Jordi Martí, y Xavier Castellana, y los diputados en el Parlament; Bernat Solé, Jenn Díaz, Ruben Wagensberg, Eva Baró, Gemma Espigares, y Òscar Peris.

El mismo apoyo ha recibido la exdiputada –que este jueves renunció al escaño– por parte del líder de Demócratas Antoni Castellà. Este ha afirmado que la no comparecencia de la secretaria general ponía "en evidencia la situación dramática en que se encuentra el Estado" ha dicho.

"Rovira es libre de desplazarse, y expresa el sentimiento de injusticia de que muchos encausados saben que no tendrán un juicio justo" ha dicho el portavoz del PDeCAT en el Congreso Carles Campuzano. Este ha negado en todo momento que la marcha de la dirigente republicana pudiera perjudicar al resto de investigados, ya que Llarena tiene previsto dictar este viernes qué medidas cautelares se aplicarían por el procesamiento. "No hay riesgo de reiteración ni de fuga, la decisión de Rovira perjudicará a los citados hoy", ha dicho Campuzano.

Este también ha tenido palabras sobre la investidura fallida de Jordi Turull –acompañado de Marta Pascal y Maria Senserrich de la ejeucitova del partido; todos los diputados del PDeCAT en el Parlament, los senadores Josep Lluís Cleries, y los diputados en el Congreso Jordi Xuclà, Sergi Miquel y Lourdes Ciuró. "Quiero poner en valor que Turull asumió sus responsabilidades y ayer dio la cara ante el Parlament" ha recordado.

El portavoz de Òmnium Marcel Mauri también se ha pronunciado sobre Rovira, disculpando la decisión de marcharse de España por la "injusticia" del juicio, y recordando la implicación con lo que querían los ciudadanos soberanistas. "Lo único que dificulta el proceso judicial son las políticas del Partido Popular" ha dicho sobre si el resto de procesados sufrirían las consecuencias.

Por Junts per Catalunya, estaban el portavoz Eduard Pujol y Elsa Artadi.