El primer secretario del PSC, Miquel Iceta, ha insistido este martes en que los gobiernos catalán y español empiecen "de forma inmediata el diálogo, la única vía de solución." Lo dice en un decálogo donde pide "al Govern que renuncie a la organización de un referéndum ilegal" y "al gobierno de España que dé una respuesta política a un problema político y no pretenda que la única respuesta del Estado a este problema político la dé el poder judicial".
La propuesta socialista es "que España se transforme en un Estado federal" vía "una reforma constitucional", cuyos rasgos están "recogidos en la Declaración de Barcelona", bendecida por el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez.
El decálogo equipara las acciones y actitud del gobierno español ("la actitud temeraria del PP") con las decisiones del Gobierno y del Parlamento y considera estas últimas "unilaterales e ilegales", para vulnerar "el Reglamento del Parlamento, los derechos de la oposición, el Estatuto de Catalunya y la Constitución española". También considera que son "un fracaso".
El documento no detalla ni condena el asalto a los departamentos de la Generalitat o las detenciones de altos cargos del Govern, la confiscación de documentación electoral o de material de campaña institucional o la de los partidarios del sí, la prohibición de mítines o la disolución de reuniones o la entrada de la Guardia Civil en medios de comunicación.
De hecho, este lunes, el secretario de organización del partido, Salvador Illa, ya se negó a hacerlo en rueda de prensa. Illa lo justificó al insistir en que el referéndum está suspendido y que "el poder judicial ha actuado en consecuencia y respetamos sus actuaciones. Todas las acciones que hasta ahora ha ordenado un juez cuentan con nuestro respeto", dijo.
Socialistas por el Sí
Los disidentes del PSC reunidos al Moviment d'Esquerres (MES) han publicado un manifiesto bien diferente. "Denunciamos de la forma más enérgica la persecución de cargos públicos y su judicialización como forma ilegítima de combatir a los adversarios políticos", dice de entrada.
MES acusa en el gobierno español "de tics autoritarios" de "haber cruzado todas las líneas rojas" y "establecer el estado de excepción por la puerta de atrás" y "liquidar la autonomía de Catalunya". La mejor manera "de enfrentarse a este neoautoritarismo [...] es ir a votar el próximo día 1 de octubre", concluye.