Jordi SànchezJordi TurullJosep Rull y Joaquim Forn siguen haciendo huelga de hambre para denunciar que el Constitucional no resuelve escritos que hace cerca de un año que se han presentado y por lo tanto bloquea el acceso de los presos a la justicia europea.

Este jueves el conseller Rull ya acumula 17 días de ayuno y, en un tuit, asegura que "la atención y la comprensión internacionales a nuestra huelga de hambre nos abre un horizonte de esperanza". En la misma línea, añade que la protesta los ha ayudado a encontrar en Europa la "imparcialidad" que no pueden encontrar en España.

Por su parte, el conseller Forn, que también lleva 17 días de ayuno, ha compartido el mismo mensaje que el extitular de Territori. 

Jordi Turull opta por subrayar que su juicio es "político" i lo justifica recordando "como el Tribunal Constitucional ha abordado la resolución de los recursos de ampara excediéndose totalmente en la demora". 

Finalmente, el expresidente de la Assemblea Nacional Catalana se pregunta si "hay alguien que crea, honestamente, que Marchena es imparcial".

Los presos políticos llevan muchos días sin comer y, como consecuencia, este miércoles por la noche el presidente Quim Torra pidió a los dirigentes políticos que pusieran fin a la huelga de hambre. El jefe del Ejecutivo se sumaba así a la petición que horas antes habían hecho a los expresidentes de la Generalitat y los expresidentes del Parlament, así como el Síndic de Greuges, Rafael Ribó.