El dirigente histórico del SPD Felix von Grünberg se ha mostrado escandalizado en declaraciones a los medios alemanes, después de testificar esta mañana en el Tribunal Supremo, por la forma como funciona la justicia española. Grünberg se ha mostrado indignado porque el partido ultra Vox participa en este juicio y formula preguntas como acusación particular, un hecho que sería absolutamente imposible en Alemania.
"Es increíble que en la Justicia española un partido radical de derechas pueda aparecer como demandante e interrogar a testigos, y que lo pueda utilizar para una campaña política, y que se transmita todo por televisión", ha indicado en declaraciones al diario de Bonn Express.
En Alemania los partidos nazis, o con referencia al régimen nazi, están prohibidos, y el resto de formaciones políticas hacen el cordón sanitario a los nuevos partidos de extrema derecha. La justicia alemana, de nuevo cuño después de la ruptura con el nazismo en los años 40, no acepta la interferencia de partidos políticos en su funcionamiento, y no existe la figura de la acusación particular.
Grünberg se ha quejado también de que el tribunal no le ha dejado expresar su opinión sobre vulneración de derechos humanos. "Es inusual que el tribunal me prohíba decir mi opinión, realmente no podía tomar posición", ha lamentado.