El Partido Popular fue la fuerza más votada en las elecciones generales del pasado 23 julio, los populares no han puesto un pie en la Moncloa. A pesar de que el PP intenta capitalizar políticamente el descontento de los pactos de investidura del PSOE, la figura de Alberto Núñez Feijóo se desgasta, sobre todo dentro del partido. Quien en un momento fue la gran esperanza de los populares, ahora se encuentra con dudas dentro de su misma cúpula. Es el caso del número tres del partido, Elías Bendodo, quien después de las generales trasladó su "incomodidad" al presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno.
Según informa El País, Bendodo habría pedido a Moreno volver al gobierno de Andalucía, ya que se encontraba incómodo en el equipo de Feijóo, donde considera que "no tiene definidas sus funciones, ni su papel, ni su espacio". Fuentes del PP sostienen que Bendodo "se siente desdibujado en Madrid, no tiene claro ni por donde irán los cambios que quiere ejecutar Feijóo en su comité de dirección, ni tampoco lo que quiere en concreto para él".
Feijóo tiene entre manos un cambio en su cúpula, hecho que aumenta la tensión y la incomodidad. No solo Bendodo se encontraría en esta situación, sino también Cuca Gamarra, actual secretaría general y portavoz parlamentaria, quien estaría molesta porque el líder popular no ha consultado ninguno de los cambios que planea ni con ella ni con Bendodo.
Bendodo sigue la estrategia del PP
El número tres del PP sigue con la estrategia general del partido ante la amnistía, al margen de su posible incomodidad en la cúpula. Bendodo ha acusado a Pedro Sánchez que Europa "esté investigando la calidad democrática" de España a causa de la ley de amnistía, porque "es un asunto preocupante y que está levantando alarma en Europa". "Europa no ha cuestionado nunca la calidad democrática de Francia, Italia o Alemania, ha podido cuestionar la de Polonia o Hungría, y ahora también la de España", ha añadido el dirigente popular.
Ha recordado que este miércoles el comisario europeo de Justicia "dejó claro que seguirá de cerca los pasos de Sánchez con respecto a la amnistía" y ha calificado de "un retroceso brutal por culpa de este Gobierno" que se investigue la calidad democrática de España. También ha resaltado la "paradoja" que eso pase mientras España tiene la presidencia de turno europea, cosa que le corresponde cada trece años y medio, y que otros países aprovechan "para prestigiarse, pero España ha perdido muchos puntos para impulsar una ley de amnistía sin duda inconstitucional, inaceptable y difícil de tragar para los españoles".