El Govern ha acordado con los grupos independentistas y el resto de partidos que participan en la mesa de diálogo, es decir, PSC y los comuns, establecer una dinámica de reuniones mensuales que pueda funcionar al margen de las convocatorias electorales o del calendario judicial del procés.

Esta es la principal conclusión de la reunión que han celebrado en el palau de la Generalitat la denominada mesa de diálogo impulsada por el PSC en el Parlament y durante la cual el Govern ha entregado a los asistentes el documento que dio el pasado 21 de diciembre al presidente español, Pedro Sánchez, en el marco de la cumbre celebrada al palacio de Pedralbes.

No ha sido, sin embargo, más que un gesto del ejecutivo dado que el Govern considera que aquel documento está desfasado mientras que el socialista, Miquel Iceta, ha advertido que "no es un documento útil para el diálogo que se tiene que abrir".

En la reunión, encabezada por el president, Quim Torra, se ha decidido crear un equipo técnico para elaborar el plan de trabajo, que se encargue de fijar las reuniones mensuales y metodología para sus trabajos, según ha anunciado la portavoz de los comunes, Jéssica Albiach, que ha sido la primera en comparecer al acabar la reunión.

La consellera de Presidència, Elsa Artadi, ha señalado la voluntad de un diálogo que sea fructífero y sirva para avanzar, por lo cual ha lamentado que algunos partidos consideren que "el diálogo es una debilidad" o "aquellos que ya vive bien en el conflicto". De hecho, las apelaciones a PP, Ciudadanos y a la CUP para que se incorporen a las reuniones -y la crítica por su ausencia- ha estado presente en las intervenciones de todos los grupos.

El diálogo de los partidos en Catalunya no se ha podido desprender del debate sobre el diálogo en Madrid, justo el día en que el Govern ha insistido en reclamar al Gobierno Sánchez un mediador que forme parte de la mesa de partidos que reclama para consensuar una propuesta política para Catalunya.

Dentro de la reunión, según fuentes de los asistentes, todos los grupos han coincidido en reclamar al primer secretario del PSC gestos por parte del PSOE.

Discrepancias ERC-JxCat

En la comparecencia posterior, tanto Artadi como los portavoces de JxCat, Albert Batet y Gemma Geis, y el portavoz de ERC, Sergi Sabrià, han advertido que las condiciones para retirar la enmienda a la totalidad de los presupuestos son garantizar un "diálogo efectivos, con un calendario y plan de trabajo y con un mediador" y que se aborde el derecho a la autodeterminación.

El portavoz de ERC, sin embargo, ha ido más allá y ha reclamado también el fin de la represión como condición para tramitar los presupuestos. "La enmienda a la totalidad ha venido para quedarse", ha advertido.

Al ser interrogada Artadi sobre si también el PDeCAT reclamará el fin de la represión para retirar la enmienda a la totalidad de los presupuestos, la consellera ha considerado que a las puertas del juicio hablar de acabar con la represión resulta "un ejercicio poco realista".