El nuevo gobierno del PP en las Balears ha confirmado que eliminará el requisito de saber catalán para acceder a un lugar de trabajo como sanitario en el sistema de salud público. La noticia se confirma justo el día siguiente de que la nueva presidenta de las Balears, Marga Prohens, haya anunciado los nombres de los nuevos consellers. La nueva consellera de Salut, Manuela García, ha confirmado este martes que el catalán pasará de requisito a mérito como medida para conseguir atraer y fidelizar personal sanitario, según recoge la agencia Europa Press. La decisión la ha anunciado en declaraciones que ha hecho a la prensa al recibir la cartera de manos de su predecesora en el cargo, Patricia Gómez.

"Somos conscientes de que no existe un problema en cuanto a la relación médico-paciente y se potenciará el uso del catalán en las consultas", ha afirmado, aunque la decisión es que la lengua catalana no hace falta que se exija para trabajar como sanitario en el sistema de salud público balear. La nueva responsable de Salut ha reiterado que el "reto más importante" actualmente es la atracción y fidelización de personal sanitario, médicos principalmente, y en zonas de difícil cobertura como Eivissa o algunas zonas de Mallorca. Con la eliminación del requisito del catalán para los sanitarios se empieza a desplegar la agenda contra el catalán pactada con Vox con el fin de investir a Prohens. PP y Vox también pactaron hacer retroceder el catalán en el sistema educativo.

Un conflicto entre entidades culturales y administración

El requisito del catalán en los sanitarios en las Balears trae cola. Entidades en defensa de la lengua y cultura catalanas, como Plataforma per la Llengua y la Obra Cultural Balear, habían mantenido una batalla con la administración a fin de que se mantuviera el catalán como lengua necesaria para trabajar como sanitario. En la convocatoria para el proceso de estabilización de sanitarios, el Govern balear había excluido el requisito del catalán en varias categorías, hecho que las entidades recurrieron consiguiendo que el anterior gobierno rectificara. Ahora, sin embargo, el cambio de ejecutivo introduce un nuevo giro de guion y el catalán, finalmente, no será una lengua que un sanitario tenga que acreditar que conoce con el fin de poder trabajar en el sistema de salud público.

El problema del catalán en la sanidad en las Balears es similar al que hay en Catalunya. La falta de personal ha abierto la puerta a la contratación de personal no catalanohablante, sobre todo desde la pandemia de la covid-19. En el caso de Catalunya, este hecho ha generado más presencia de sanitarios castellanohablantes. A pesar de los programas de acogida lingüística, muchos de estos sanitarios no se sienten atraídos para aprender el catalán. Algunos expertos consideran que recibir atención médica en la lengua propia es necesario, aparte de que las entidades culturales reivindican que hay que respetar los derechos lingüísticos de los usuarios del sistema sanitario.