El Govern, Junts pel Sí (JxSí) y la CUP aguantan el envite del Tribunal Constitucional. Las reacciones en este sentido han ido surgiendo en cascada tan pronto como el TC ha anunciado que había decidido por unanimidad suspender las conclusiones de la comisión del Procés Constituent que aprobó el Parlament, además de advertir personalmente a la presidenta de la cámara, Carme Forcadell, y al president, Carles Puigdemont, de su eventual responsabilidad.

El mismo Puigdemont ha respondido a través de las redes a la decisión del TC para dejar claro que obedecer al Parlament forma parte de la normalidad democrática, aunque el Estado "lo convierte en una proeza". "Obedeceremos, y tanto que sí. Obedeceremos al Parlament", ha subrayado el presidente por Twitter.

 

Junqueras: "Continuaremos obedeciendo al 27S"

También el vicepresident, Oriol Junqueras, ha destacado a través de las redes que la resolución del TC no aporta ninguna novedad y ha insistido que el Govern i el Parlament continuaran "obedeciendo el mandato democrático surgido de las urnas".

El conseller d'Afers Exteriors, Relacions Institucionals i Transparència, Raül Romeva, y la consellera de Treball, Afers Socials i Famílies, Dolors Bassa., han reaccionado también a través de sus respectivas cuentas de Twitter. Previamente, Romeva ya había reprochado en declaraciones al 3/24 antes de saberse la resolución del TC, que resulta "inaudito" que en un Estado de Derecho haya "alergia, incluso fobia, a parlamentar". "Es inconcebible que un Parlament no pueda discutir de todo", ha reprochado.

Por la mañana, la consellera de Presidència, Neus Munté, había denunciado que el papel que está jugando el TC contra el procés "no se entiende en ningún sitio del mundo". Munté ha subrayado en declaraciones en la Cadena SER que "lo que está haciendo el Parlament es obedecer y sacar adelante el mandato democrático".

Pascal: "Rompe principios básicos de la democracia"

Desde el Partit Demòcrata Català, la coordinadora general, Marta Pascal, ha lamentado que el "Estado ha roto de nuevo los principios básicos de la democracia y se ha demostrado, una vez más, que la separación de poderes en el Estado español hace tiempo que no existe". Para Pascal, "es inaceptable que el TC anule una resolución política que emana de la soberanía del pueblo de Catalunya", aunque admite que "desgraciadamente no hay ninguna novedad" en esta actitud.

"Nada nos hará renunciar a seguir siendo fieles al mandato que la gente expresó en las urnas el 27 de septiembre; al Partit Demòcrata nos guía este mandato", ha asegurado la coordinadora del PDC a través de un comunicado.

Por su parte, el presidente del grupo parlamentario de JxSí, Jordi Turull, ha expresado su opinión a través de twitter.

 

Tardà: "Si hace falta, desacataremos"

El republicano Joan Tardà ha acusado al TC de optar "de forma desvergonzada por la vía autoritaria, por la vía de la violencia judicial". "Lo más importante es que nosotros nos mantengamos fieles al Parlament. Si hay que desacatar, desacataremos", ha asegurado el diputado de ERC en declaraciones a Catalunya Ràdio.

 

CUP: "No acataremos"

En nombre de la CUP ha sido la diputada Mireia Vehí quien ha dejado claro que los cupaires no tienen intención de acatar al TC. "A pesar de la suspensión seguiremos con el despliegue del procés constituent y no acataremos la resolución del Tribunal", ha asegurado. Antes de saberse la decisión del alto tribunal, la diputada Anna Gabriel había advertido en declaraciones a Catalunya Radio que la "inhabilitación de cargos electos" sería un punto de no retorno para el Estado español.