El Gobierno central ha acusado este sábado al portavoz del PDC en el Congreso, Francesc Homs, de cuestionar el funcionamiento de la Justicia "con acusaciones radicalmente falsas" con el único objetivo de "distorsionar" los motivos por los que está implicado en la causa judicial por la consulta catalana del 9-N.

Así, el Ejecutivo argumenta que "su legítimo derecho de defensa" ante la declaración que prestará este lunes en calidad de investigado en el Tribunal Supremo (TS) "no lo autoriza mentir, difamar y calumniar", refiriéndose a las afirmaciones hechas hoy por el exconseller en las que apunta que la Justicia española "está absolutamente volcada en la Operación Catalunya".

Según fuentes oficiales del ministerio del Interior, el político catalán intenta cuestionar el funcionamiento de las instituciones "con el único objetivo de distorsionar las razones por las que tiene que responder ante la Justicia", y pone en cuestión las investigaciones en otros procesos judiciales, cuya nulidad pretende conseguir "con medios torticeros".

Por este motivo, desde el departamento que dirige Jorge Fernández Díaz reclaman al que fuera portavoz del Govern "respeto" a las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado y al resto de instituciones, si bien Homs insiste en que el Ejecutivo está utilizando la Justicia "como una extensión de su maniobra contra Catalunya".

Comparativa con los GAL

En una entrevista en el diario El Punt Avui, Homs ha recalcado que el Gobierno del PP se ha "cargado" la separación de poderes y se ha referido a los Grupos Antiterroristas de Liberación (GAL) para recordar que este Estado "en plena democracia" ha "matado".

Sobre la declaración que prestará este lunes ante el Tribunal Supremo por su implicación en la consulta del 9-N, Homs ha afirmado que les comunicará a los magistrados que tienen que ser conscientes de que "están al servicio de los intereses del PP y de una operación contra Catalunya" y que se trata de una causa "arbitraria, política y partidista".

Así lo ha dicho este sábado en rueda de prensa flanqueado por diputados y miembros de la ejecutiva del reciente formado PDC, donde ha asegurado que argumentará esta frase ante el alto tribunal y defenderá que la querella "no se tendría que haber admitido nunca a trámite".