Las visitas a la prisión son limitadas. Las llamadas con los familiares son de cinco minutos, las visitas semanales de cuarenta -siempre detrás de un cristal-, y sólo una vez al mes puede haber contacto físico, como abrazos y besos.

"Hoy vamos a ver al padre. Ya han pasado muchos días desde el último abrazo", recoge el perfil de Facebook y de Instagram del vicepresidente Oriol Junqueras, acompañado de una fotografía de sus hijos.

En la imagen se ven los dos niños sentados al suelo y sobre una maleta a la estación de Sants de Barcelona, donde esperan para coger el AVE dirección Madrid.

Junqueras está encarcelado en Estremera desde el pasado 2 de noviembre, ahora hace cinco meses.