El conseller de Interior, Quim Forn, en régimen de prisión preventiva en Lledoners y procesado por el 1-O, ha pedido este sábado que se dé "apoyo político y social explícito" a los Mossos d'Esquadra, después de unas semanas de críticas tanto por "inacción" como por "desproporción" del uso de la fuerza del cuerpo con las acciones de los CDR.

"Tenemos que poner el trabajo fácil a Miquel Buch y al cuerpo de Mossos, porque muchos partidos quieren que desaparezcan. No entender eso es no entender el gran trabajo que tiene Buch al frente", ha dicho en una entrevista a Rac 1. Además, Forn, que hace doce días que se declaró en huelga de hambre y pierde un kilo cada día desde entonces, ha explicado que el traslado a Madrid para el juicio será entre el 10 y el 15 de enero y asegura que quiere estar "recuperado" cuándo empiece la vista

"Para mí el juicio no es un trámite. Iré a luchar. ¿Esperanzas? Quizás no, pero con el Código Penal en la mano sólo se tiene que tener en cuenta la absolución. No he hecho nada", ha valorado.