El ministro del Interior en funciones, Jorge Fernández Díaz, ha reconocido que condecoró al polémico comisario José Manuel Villarejo, recién jubilado, sin ser consciente de ello. "¡Yo no le he condecorado jamás!", responde en una entrevista que publica este viernes la revista Vanity Fair, antes de que su director de Comunicación le saque de su error y le confirme que efectivamente le condecoró en 2014.

"En todo caso, si lo he hecho no me he enterado, así de claro. ¿He condecorado al comisario Villarejo? [pregunta a su director de Comunicación, presente en la entrevista, que se lo confirma]. Yo he condecorado a multitud de policías. Me pasa la propuesta la Dirección General de la Policía y yo firmo la resolución. No tengo la necesidad ni el deber de conocer a los 67.000 policías que existen", se justifica, según la transcripción publicada por Vanity Fair.

Las preguntas que giran en torno a Villarejo, investigado en el juzgado de instrucción 2 de Plaza de Castilla por su presunta relación con una grabación a policías y agentes del CNI en una derivada del caso del Pequeño Nicolás, marcan los momentos más tensos de la entrevista.

"Yo no tengo interés en hablar de él, así de claro. Oye perdonadme, es que sino, se termina esto, ¿eh?", espeta el ministro a las periodistas que le entrevistan cuando le preguntan directamente qué trabajo realizaba y a quién reportaba Villarejo, veterano agente con una hoja de servicios tan amplia como polémica y que se ha definido a sí mismo como "agente encubierto".

Operación Catalunya

En otro momento de la entrevista, las periodistas de Vanity Fair le preguntan al ministro por unas declaraciones de Villarejo ante el juez en las que admite haber trabajado intensamente para frenar el proceso independentista. "Bueno, pues se lo preguntan a él. No tengo ni idea, ni me interesa, ni es mi problema. ¿Está claro? Vale ya, vale ya. Una cosa es preguntar y otra es hacer un interrogatorio judicial, así que cuidadito", contesta abruptamente el ministro antes de poner fin a la serie de preguntas en torno al comisario, a quien dice haber visto "dos veces" y hablado con él "dos minutos".

De Alfonso

En la entrevista también aparece la conversación filtrada que el ministro mantuvo con Daniel de Alfonso, el exjefe de la Oficina Antifrau de Catalunya. En aquellas conversaciones los dos hablaban de buscar eventuales casos de corrupción que afectaran ERC y CDC. De hecho, la entrevista empieza así cuando las periodistas que lo entrevistan en su despacho del ministerio empiezan a grabar la entrevista. El mismo ministro dice al ver los aparatos de grabación: "Esto de las grabadoras... Aquí mismo se sentó el director de la Oficina Antifrau". 

Después de que él mismo introdujera el tema, las periodistas aprovechan para preguntar quién lo grabó, a lo que el ministro espeta: "Por aquí empezaremos? No hombre, no...". Así es como el ministro empieza a esquivar algunos temas espinosos, una tendencia que sigue durante toda la entrevista.

La entrevista con Vanity Fair ha permitido al ministro contestar al fiscal Pedro Horrach, que en otra entrevista con la misma revista opinó que Fernández Díaz tendría que haber sido cesado y encausado por el contenido de la conversación con De Alfonso.

Después de subrayar que la Fiscalía ha dicho que no hay indicio de que el ministro haya cometido ningún delito, Fernández Díaz contesta a Horrach: "Yo voy a tener hacia él el respeto que él no ha tenido hacia mí. Y me callo la opinión que me pueden merecer algunas de sus actuaciones. ¡Y punto! A partir de ahí el fiscal Horrach puede cantar misa".