El rey Felipe VI ha mantenido su tono frontal con el independentismo en su discurso con motivo de los 40 años de la Constitución española en el Congreso de los Diputados. En un acto solemne y en presencia de los reyes eméritos, los padres de la Constitución y el presidente del Gobierno y sus antecesores, monarca ha dejado bien claro que es la Constitución la que fija las reglas del juego, sin dejar abierta en ningún momento una posible reforma.

Felipe VI ha dicho que debe haber la voluntad de todos para entenderse, pero ha insitido en que esto debe hacerse respetando las leyes, sin ningún tipo de imposiciones. El monarca ha defendido que las diferencias hay resolverlas con diálogo, acudiendo a los tribunales si es necesario y, en un claro aviso al independentismo, cumpliendo las decisiones judiciales. 

El Rey ha afirmado que "resolver las diferencias con diálogo, respetar las leyes y los derechos de los demás, ejercer estos derechos, acudir a los tribunales para defender y respetar sus decisiones son principios arraigados definitivamente en el comportamiento de los ciudadanos". 

Durante su discurso, el monarca ha dicho que España ha vivido "hechos muy graves" en los últimos años pero es una "democracia firme y plenamente consolidada", en la que el texto constitucional "ha prevalecido". Según Felipe VI, los valores constitucionales tienen ahora "plena vigencia".

Joan Carles Sofia efe

El monarca ha insistido en varias ocasiones en que la Constitución es un gran pacto de convivencia entre los españoles "para la concordia y la reconciliación" sobre el que se sustenta el Estado de derecho. La Carta Magna, ha afirmado, se redactó bajo el espíritu de la reconciliación, el entendimiento y la integración, aspectos que, a su juicio, "consolidan un estado democrático y de derecho".

Ausencias

A la ceremonia han asistido los líderes de los principales partidos españoles, como Pablo Casado (PP), Albert Rivera (Ciudadanos) y Pablo Iglesias (Podemos). Como en las últimas ediciones, esta también cuenta con las ausencias habituales: las de los representantes de Esquerra Republicana (ERC), el PNV, el PDeCAT y Bildu, a los que este año se les suma En Comú Podem.