Todos los barones del PP, e incluso el mismo Pablo Casado, ya le han señalado como futuro líder del partido, como la persona que tiene que coger las riendas después de la grave crisis. Pero el anuncio de candidatura por parte de Alberto Núñez Feijóo todavía se hace esperar. No será hasta mañana que anunciará qué hace. Antes quiere reunir a la Junta Directiva de los populares en Galicia, encuentro que tendrá lugar mañana a las cinco y media de la tarde, para escuchar a sus suyos compañeros en el territorio. El presidente de la Xunta también ha aprovechado para pedir que se presente todo aquel que lo considere, aunque todos los ojos hace días que sólo miran hacia él.

Después de la reunión de la Junta Directiva Estatal, este mediodía en Madrid, Núñez Feijóo ha explicado que ha pedido al secretario general del PP gallego que convoque para mañana por la tarde una reunión de la Junta Directiva a Santiago para ver "cómo podemos ayudar desde Galicia ante la situación del PP". Y después de escuchar a sus compañeros ha añadido, "me dirigiré al conjunto de los españoles para trasladarlos cuál es mi decisión". El presidente de la Xunta ha pedido respetar los procedimientos internos. Y también ha reclamado que, si algún compañero quiere presentarse, que lo haga; que "es su momento", que "no tenga miedo".

"Los dirigentes tenemos que escuchar y tenemos que reflexionar", ha defendido el dirigente gallego en declaraciones a los periodistas, que ha insistido que cualquier persona que crea que tiene un proyecto y apoyos debe dar un paso adelante. "Yo lo hice en 2006. No era el candidato con más opciones, y hoy me les dirijo como presidente del PP de Galicia y de la Xunta de Galicia", ha recordado.

Alfombra de Casado

Ya se lo pidió, en privado, el jueves pasado en la reunión que mantuvieron en Génova. Y hoy lo ha hecho en público: Pablo Casado ha instado al presidente gallego Alberto Núñez Feijóo a coger las riendas del Partido Popular que él deja. El presidente saliente del PP ha aprovechado su intervención delante de la Junta Directiva Nacional, reunida en Madrid, para reclamar también que el partido no sufra más sobresaltos, que se construya un nuevo liderazgo con un "proyecto de unidad". Más allá del futuro de la formación, Casado también ha dejado claro que se va "con la conciencia muy tranquila", a pesar del desgaste y los ataques sufridos durante las últimas dos semanas en su guerra con la presidenta madrileña Isabel Díaz Ayuso. Hoy se ha convocado oficialmente el Congreso del PP, que tendrá lugar los días 1 y 2 de abril en la ciudad de Sevilla.

Sólo arrancar su intervención pública en la Junta Directiva, Pablo Casado también lo ha señalado como el escogido. Ha agradecido la "lealtad y amistad" que ha recibido de él durante los últimos cuatro años, "la misma lealtad y amistad que recibirá de mí para lo que decida hacer". También ha asegurado que ahora lo que toca es un "proyecto de unidad" que permita salir "fortalecidos" y "no dedicar un solo minuto más a hablar de nosotros". Son las dos directrices que ha planteado de cara al futuro, advirtiendo que "los enemigos de la libertad siguen allí".