El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha criticado el saludo que hizo la presidenta de Junts, Laura Borràs, a los manifestantes independentistas después de la conmemoración de los atentados yihadistas del 17-A el miércoles en Barcelona y se ha mostrado escandalizado por los eslóganes que estos corearon culpando al Estado español de estas acciones terroristas. En declaraciones durante una visita en Porto do Son (La Coruña), ha calificado de "actos de fanatismo culpar al gobierno central, al Estado, es decir a los españoles" de los atentados de hace 5 años, a pesar de las incógnitas que existen sobre el imán de Ripoll y su relación con el CNI.

Feijóo ha sentenciado que partidos "como el de Borràs" no pueden ser "clave de la gobernabilidad en España" con estos posicionamientos. Y ha insistido que lo que le preocupa es que estos políticos "estén mandando en España y sean socios prioritarios del gobierno de España", como serían a su entender Junts o ERC. Ve como un "disparate" que con estos partidos políticos "se esté gobernando en España a través de alianzas parlamentarias". En realidad, sin embargo, hay que recordar que Junts está en la oposición en el Congreso.

Este fue el momento en el que uno de los manifestantes rompió el minuto de silencio, que se había respetado hasta el segundo 45. Gritó "España es un Estado asesino". Otros llevaban letreros reclamando conocer la verdad de los atentados y cuestionando la versión oficial, y abuchearon a los representantes institucionales.


Nuñez Feijoo ha advertido que eso no se puede dar por normal ni habituarse a estas situaciones, y por eso cree que después de los hechos de ayer tendría que quedar claro que este tipo de actuaciones políticas no se pueden admitir. Ha asegurado que existen una serie de políticos que "practican el fanatismo" no sólo en sus planteamientos ideológicos sino en sus actitudes personales.

El líder del Partido Popular se presenta en las encuestas como el preferido para ocupar La Moncloa después de las próximas elecciones. Aunque los populares se recuperan en las encuestas autonómicas y estatales, hay territorios donde se siguen encontrando las puertas cerradas: Catalunya y País Vasco. Así lo reconoce el mismo Feijóo en una reciente entrevista en El País, donde ha afirmado: "Es muy difícil gobernar España si el PP no sube a Catalunya".

"Hay cuatro grandes motores electorales: Andalucía, Catalunya, Madrid y el País Valencià", ha asegurado al líder popular y ha añadido: "De estos cuatro motores, tres están funcionando bien". ¿Cuál es el que no funciona? Para el PP, Catalunya. "En Catalunya hemos tenido unos resultados muy malos", ha reconocido, pero hasta aquí la autocrítica, ya que rápidamente ha señalado el independentismo.